Una de las zonas en las que la campaña de las Concejalías de Tráfico y Medio Ambiente ha dejado una imagen casi irreconocible es en la vieja carretera de Madrid. Hace ya años que en sus márgenes se "plantó" una hilera de remolques, caravanas e incluso camiones de feriantes. Algunos ni si quiera se movían desde 2009 y tenían problemas judiciales, lo que impedía al Concello actuar. Finalmente, y tras una ardua labor de investigación, han logrado "sanear" esta zona. Y, al igual que en la mayoría de casos, no fue preciso recurrir a medios municipales. "Se advirtió a sus propietarios que debían retirarlos y, que si no procedían, sería el propio Ayuntamiento el que lo haría. A los pocos días se los llevaron", explican fuentes municipales. La zona quedó plagada de desperdicios que el departamento de Limpieza ya erradicó. Se hallaron incluso gatos muertos bajo los vehículos.