El Grupo Geoma (Geología Marina y Ambiental) de la Universidad de Vigo confirma llegadas periódicas de masas de agua dulce a la Cuenca Interior de Galicia durante los últimos 80.000 años, lo que pone de manifiesto la importancia de esta zona para desentrañar qué causa y cómo se produce la desintegración del casquete norpolar.

Los resultados de la investigación serán publicados en el próximo número de la revista científica "Earth and Planetary Science Letters", y ya están disponibles en la versión en línea de esta publicación.

Los investigadores del Grupo Geoma llevan años estudiando la topografía de la Cuenca Interior de Galicia -una profunda depresión submarina de más de 3.000 metros de profundidad- con el objetivo, entre otros, de avanzar en la reconstrucción del clima a partir de sedimentos y datos oceanográficos.

El experto principal del grupo, Daniel Rey, explica que este trabajo tiene "trascendencia para comprender mejor cuáles serían las consecuencias y cómo se desarrollaría el cambio climático que tendría lugar si prosigue la tendencia de calentamiento global de origen antropogénico".