El grupo empresarial con sede en O Carballiño, Dizmar, construirá los tableros metálicos sobre los que se asfaltarán los dos nuevos carriles del puente de Rande. La UTE adjudicataria de la ampliación, integrada por Dragados y Puentes y Calzadas, ha adjudicado el contrato a la empresa ourensana dejando fuera de la actuación a Vulcano.
Hasta la fecha, el astillero vigués daba por hecho su participación en esta obra. Incluso el pasado diciembre, en la botadura de la rampa móvil flotante para la autopista del mar de Vigo, sus responsables confesaban ante los medios que acabado este contrato confiaban en recibir pronto la llamada de las constructoras de Rande. Ahora, descartado de este proyecto, el futuro de Vulcano sigue igual de complicado al carecer de nuevos pedidos firmados ni en expectativa.
Dizmar asume así la fase más delicada de un proyecto de ampliación del viaducto que fue adjudicado a la citada Ute por 130 millones de euros. Y por el anuncio realizado días pasados por las constructoras, el grupo ourensano se pondrá a trabajar de inmediato ya que la Ute situó el inicio de la instalación de las primeras piezas vinculadas a los tableros durante el otoño.
En concreto, la misión de Dizmar será la construcción de 76 dovelas de acero. Mediante su ensamblaje se formarán los tableros -38 dovelas por cada uno- que por secciones serán izados desde el mar por un sistema de grúas hasta posicionarlos al nivel del resto de los carriles. Y una vez conectados con los tirantes se procederá al asfaltado de los nuevos viales.
En la actualidad, la actividad de las constructoras se centra en la instalación de los cables y las cabezas de anclaje. En paralelo ya ordenó la fabricación de las rótulas destinadas a la unión de piezas nuevas con la estructura que soporta el puente.
Pese a la apariencia, los trabajos vinculados al proyecto del viaducto de Rande fueron hasta ahora a ralentí, un ritmo intencionado por parte de las constructoras. Durante todo el año pasado Dragados y Puentes intentaron cambiar el diseño de la actuación por uno más sencillo, que eliminaba precisamente los tableros. Una pretensión que chocó frontalmente con el Ministerio de Fomento, que descartó de plano cualquier variación sobre el formato adjudicado al tratarse de una "alteración sustancial".
Ahora las compañías fijan para otoño el montaje de las piezas, manteniendo el diseño original con los dos tableros laterales.
