Después de que desatendiera durante año y medio el mandato unánime del Parlamento gallego para que el seguimiento de los lesionados medulares del sur de Galicia se realice en el Álvaro Cunqueiro, la Consellería de Sanidade recibió a representantes de estos afectados y se comprometió a hacerlo realidad. La reunión se celebró el 19 de febrero. Desde entonces, nada se sabe. El Servicio Galego de Saúde asegura que se "sigue avanzando" en el asunto, pero elude ofrecer más detalles. Mientras tanto, cada vez que tienen una revisión o sufren una complicación, estos pacientes con movilidad reducida siguen teniendo que desplazarse hasta la unidad de A Coruña, la única de la red pública gallega para estos casos.
En Galicia hay unos 4.000 lesionados medulares y la mayoría están en el sur de la comunidad -2.600 según los colectivos afectados-. Su atención requiere de profesionales especializados y se divide en dos fases. La aguda, inmediata a la lesión, en la que se opera al paciente y se mantiene ingresado hasta su estabilización, con una estancia media de seis meses. Las periódicas revisiones y la resolución de las complicaciones constituyen la segunda de estas etapas, que se prolonga el resto de su vida. Para cualquiera de las dos, tienen que desplazarse hasta A Coruña.
La lucha por conseguir el acercamiento de la atención al sur de Galicia comenzó hace dos años cuando Francisco Pérez, el padre de uno de los ingresados en A Coruña, inició una campaña ciudadana para reclamar que la Administración aprovechara la apertura de un nuevo hospital -faltaba más de un año- para poner remedio a esta situación con la creación de la segunda unidad gallega. Los propios administradores de Change.org se mostraron sorprendidos por el "crecimiento brutal" del apoyo, con 17.000 rúbricas en once días. Meses después, los colectivos afectados renunciaron a la hospitalización de agudos en el Álvaro Cunqueiro por la gran inversión que esto requeriría y concentraron sus esfuerzos en exigir que, al menos, se realice en Vigo el seguimiento. El Parlamento gallego, por iniciativa del propio Partido Popular, respaldó su demanda y aprobó por unanimidad la creación de un equipo multidisciplinar para esta atención en Beade. Era el 10 de septiembre de 2014.
A la vista de que Sanidade hacía oídos sordos al mandato parlamentario, los afectados se organizaron como asociación a principios de este año: la Plataforma de Lesionados Medulares de Galicia. En marzo, la consellería los convocó a la primera reunión, después de que su situación volviera a los medios. El Sergas anunciaba que "se harán protocolos entre los servicios de Vigo y A Coruña", pero no ha transcendido ningún progreso desde entonces. De hecho, en el Servicio de Rehabilitación del Chuvi, indispensable para establecer este enlace, desconocen "ningún tipo" de movimiento. Su jefe, el doctor Javier Juan García, fue precisamente el médico encargado de inaugurar la unidad coruñesa en 1988.
