Ser la primera mujer fotógrafa en exponer en Galicia y 65 años de trayectoria son metas muy difíciles de alcanzar para cualquier profesional de la imagen. Es por ello que la Agrupación Fotográfica Galega ha decidido rendirle un homenaje a Mary Quintero inaugurando su ciclo de conferencias para este año con su presencia.
La fotografía ya le venía de familia, de sus padres. Y a esta afición añadió la pintura, y juntas marcaron el destino de sus ojos y manos. A pesar de las dificultades de la posguerra, la envían a estudiar a Madrid, donde se forma con un reconocido fotógrafo y asiste a la Escuela de Arquitectura.
A los quince años expone por primera vez en Lugo, causando una gran repercusión que le ganará la fama y la reclamarán los sectores de la alta sociedad viguesa para sus retratos. Cuatro años después realiza otra existosa muestra en la ciudad olívica y decidirá asentarse en ella.
Abrió un estudio en la calle Urzáiz, que se convirtió en testigo de la historia de la ciudad, donde vio pasar gentes y épocas. En él fue perfeccionando su técnica e innovando en su arte. La incorporación de la pintura a sus instantáneas será una constante en su obra, así como el cuidado de la luz.
Ha recibido numerosos premios y distinciones a lo largo de su carrera e imparte charlas y conferencias en España y Portugal. Mary Quintero sigue en activo, cámara o pincel en mano.
