Detectar sueños con alta tensión. Seiscientos pacientes del área sanitaria de Vigo durmieron pegados a un holter desde el mes de marzo. Un estudio pionero en el que participan nueve centros de salud se está exportando a otros concellos de Galicia a petición de los propios enfermos y de facultativos. Ourense y Lugo ya se han apuntado al proyecto. El motor de la idea fue mejorar la salud de los pacientes y hacer una investigación a cinco años vista.

El objetivo, controlar la tensión arterial en un momento en el que nunca se la medirían los pacientes: por la noche. Es cuando muchos descubren que su tensión no baja el 10% que debe de reducirse en esas horas de reposo. "Si no disminuye lo suficiente, el riesgo de sufrir infartos cerebrovasculares o ictus es mayor", explican médicos implicados. Esta teoría, suficientemente documentada, denomina al paciente que no consigue reducir su ritmo arterial nocturno de "no-dipper" (en inglés).

El paciente va rellenando un diario mientras está monitorizado, con datos sobre la actividad que realiza y apunta las horas de comidas, de levantarse, acostarse o la toma de medicación.

La prueba móvil permite ver la evolución de los latidos y el esfuerzo del corazón durante un máximo de 72 horas. Es el tiempo que dura la batería del aparato inalámbrico, que puede costar entre 3.000 y 4.000 euros. Aún así, habitualmente el paciente lo lleva sólo durante dos días ininterrumpidamente. El médico puede aplicar luego un tratamiento de "cronoterapia". Es decir, dar una medicación adaptada a las horas que mejor resulten para el enfermo. El resultado práctico es que a algunos se les cambia el horario o se les sustituye el tratamiento que llevaban.

¿Puede ducharse?

Pocos refieren la incomodidad de dormir con el medidor bajo la almohada, aunque sí las dificultades de asearse con él puesto. Por eso, los médicos recuerdan que se puede quitar durante media hora para pasar por la ducha. El manguito que se ase al brazo tiene varias medidas, lo que permite que no apriete demasiado.

Los que participan en este estudio experimental son pacientes con riesgo cardiovascular alto, elegidos por su perfil médico y que lo hacen de forma voluntaria. El coordinador de "Hygia" (nombre del estudio) y médico de atención primaria en A Guarda, Juan Crespo, asegura que entran en la selección tanto los enfermos con problemas de hipertensión resistentes, los que sufren diabetes, obesidad o han padecido un infarto o ictus.

Es la primera vez que se realiza en España una investigación de este tipo, de forma conjunta entre el Sergas y un departamento universitario. Colabora el Laboratorio de Bioingeniería y Cronobiología de la Universidade de Vigo.

Hipertensos de "bata blanca" y nocturnos

"Hay gente que da perfecto durante el día y luego descubre que es hipertensa por la noche", explica otro de los médicos de atención primaria involucrados, de Baiona, Lorenzo Pausa. En el extremo opuesto se hallan los pacientes con "hipertensión de bata blanca", una las curiosidades de la tensión arterial. Se da entre pacientes que desarrollan un fenómeno de alerta que hace que se incremente su tensión cuando van al médico. "Este sistema es una revolución en el campo de la hipertensión", añade, "hay personas que creíamos que estaban bien controladas y no lo están". Los que trabajan en el estudio -cuyos datos se renuevan cada semana en la web y en colaboración con la Universidad- insisten en demostrar que esta herramienta es muy adecuada para Atención primaria, porque se adapta a cada paciente.