La boda del alcalde de Madrid condiciona la investidura de Rueda

El presidente en funciones retrasará su toma de posesión a la segunda semana de abril

Alfonso Rueda y José Luis Martínez-Almeida presentando la Semana Xacobeo 21-22 de Madrid

Alfonso Rueda y José Luis Martínez-Almeida presentando la Semana Xacobeo 21-22 de Madrid / Xunta

R. S. C.

La investidura de Alfonso Rueda se celebrará casi con toda seguridad la segunda semana de abril para esquivar no solo la Semana Santa con la que finaliza este mes de marzo, sino también la boda del alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, prevista para el 6 de abril.

Los conselleiros y otros cargos del PP ocultan a duras penas su nerviosismo por conocer la configuración de la Xunta de Rueda en el que será su primer mandato tras haber sido candidato del PP a ocupar el timón de San Caetano.

Lo que no esperaban era que el enlace de Almeida con Teresa Urquijo, más de dos décadas más joven que él, interfiriese en un calendario que todavía se desconoce.

Una vez constituido el Parlamento, sesión que se celebró ayer, comienza a activarse el plazo de un mes para celebrar el debate de investidura. La previsión inicial era que tuviese lugar tras Semana Santa, pero la irrupción de la boda del regidor de Madrid contribuye a dilatar una semana más los plazos.

Calendario

En principio, la sesión con el discurso de Rueda podría producirse el 9 de abril para ser sometido a votación dos días después. La clave radica en que, como es costumbre, ese fin de semana tomaría posesión el sábado y anunciaría su gobierno el domingo. De acometer este proceso la semana previa, el presidente del Ejecutivo en funciones difícilmente podría participar en la boda de Almeida. Y los invitados, como otros barones del PP e incluso el propio Feijóo, deberían elegir entre un acto institucional o la fiesta nupcial de Almeida.

Aun así, fuentes del Ejecutivo reconocían en privado el lunes que poco importaba dilatar los plazos una semana más o menos porque la Xunta “está funcionando con normalidad”.

"Da igual un sábado que otro"

El vicepresidente primero de la Xunta en funciones, Diego Calvo, ha restado importancia a que no se empleen las primeras fechas disponibles para celebrar la investidura del jefe del Ejecutivo gallego, ya que "da igual un sábado que otro".

Calvo se ha pronunciado así cuestionado por la posibilidad de que la toma de posesión de Rueda se dilate hasta la segunda semana de abril, apurando al máximo los plazos posibles, y ha reiterado que, en todo caso, la fecha "no está cerrada a día de hoy".

"Habrá que ver el presidente cuando establece el día", ha comentado el número dos del Gobierno gallego, que ha apuntado que la toma de posesión del presidente siempre suele ser un sábado y la de su equipo el siguiente lunes. Para él, sin embargo, "a estas alturas carece de importancia" el día elegido.

Preguntado directamente por la posibilidad de que se opte por el segundo fin de semana de abril para no hacer coincidir la toma de posesión en el Parlamento con la boda del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, el próximo día 6 de ese mes, Calvo ha aclarado que él a esa ceremonia no está invitado por lo que tiene el sábado disponible para acudir al acto institucional en la Cámara gallega.

Sobre su continuidad en el Gobierno, Calvo ha remarcado que esa "decisión" le corresponde tomarla al presidente aunque está a su "disposición" al igual que el resto de sus compañeros.

Ha dicho que él respetará todas las decisiones que adopte el también líder del PP en Galicia, porque "lo que haga seguro que está bien".

Además, ha puesto en valor el trabajo realizado por su vicepresidencia y consellería y ha señalado que "esto ha sido una etapa muy bonita y muy buena", pero a partir de ahí "el presidente tiene que tomar".