La agricultura ecológica despega: triplica la superficie certificada en diez años

Con más de medio centenar de reses de bovino, una de las explotaciones extensivas que obtuvo las certificaciones de ganadería ecológica en Galicia hace más de una década –cuando ni por asomo se intuía como garantía de éxito–, ahora no solo vende leche fresca de proximidad y la distribuye en un radio de solo cien kilómetros, sino que produce cosméticos que utilizan lácteos como ingrediente. La Granja Maruxa, de la que la viguesa Marta Álvarez ha sido el alma mater, y a través de una cooperativa y otro sello, es solo una de los más de 1.500 operadores en ecológico que ya se registran en Galicia. Un pequeño ejemplo de un sector pujante que según los expertos, aún no ha tocado techo.

Sea como sea, los datos avalan ese despegue en la última década tanto en superficie certificada, que se ha triplicado, (creció casi un 200%) como en lo que respecta al número de operadores inscritos, que vivió un incremento del 148%. Los datos de facturación, consecuentemente, fueron espectaculares: la subida registrada llegó al 385%, según datos facilitados por la Consellería de Medio Rural. Así, en Galicia la superficie certificada en ecológico llega actualmente a las 45.600 hectáreas y la cifra de operadores ecológicos supera los 1.500. El valor económico estimado ronda los 113 millones de euros, según datos de 2022.

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La leche y sus derivados constituyen, seguidos de la carne y derivados; las conservas de pescado; otros elaborados y los huevos y derivados los productos más destacados en este ámbito productivo, según aseguró el director de la Axencia Galega da Calidade Alimentaria, José Luis Cabarcos. El ranking de los diez primeros productos amparados por el Consejo regulador de la Agricultura Ecológica de Galicia (Craega) se completa con los productos de la acuicultura; los piensos y alimentación animal; los vinos licores, sidras y vinagres; las frutas y los aceites.

Las buenas noticias con los frutos del campo parecen también extenderse a la ganadería en ecológico. En ganadería, el bovino cuenta con algunas de las zonas más destacadas de España, cuya producción en ecológico ya asciende hasta el 6% del total de reses. Mientras las malas noticias por cierre de explotaciones y falta de rentabilidad de las granjas se agolpan, este sector vive un auge sostenido desde hace unos años. Hay centenares de marcas que, al amparo de sellos ecológicos, ofrecen desde la ganadería productos de lo más diverso y ayudan a fijar población y mantener el mundo rural.

“Las vacas que pertenecen a agricultura ecológica sitúan especialmente Galicia ya a la par de los Valles del Guadalquivir y Guadiana, y Pirineo catalán.Asimismo, las producción de aves de corral en ecológico se concentra especialmente en comarcas de Gipuzkoa y norte de Navarra, pero también en el interior de Galicia y la provincia de Girona”, apunta el último censo agrario, que publica el Ministerio y que sitúa su mirada sobre las comarcas gallegas. La zona de Ourense, donde 13 explotaciones de vacas ecológicas marcan el 5,7% del sector, según el Censo Agrario, y Valdeorras, con 1.472 cabezas de bovino ecológico y 12 explotaciones (4,5%), junto con las montañas de Pontevedra –con 31 explotaciones y 1.146 vacas– y la de Lugo –con 24 explotaciones y 1.644 reses–.

El Foro Económico de Galicia, que aludió en marzo a la insuficiencia de los fondos que destinó la Xunta el año pasado a este tipo de agricultura, incidió en la solicitud de un aumento de los fondos Feader, con la que se lograron hasta 36 millones de euros para la agricultura ecológica.

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