La universidad inicia la captación de 3.100 adultos para cursos de formación continua

La sangría demográfica y la competencia por FP ensombrecen el horizonte de los campus. El Plan Galego de Financiamento universitario 2022-26 reconoce que estos factores presionan a la baja la matrícula y entre las alternativas que maneja está la apuesta por captar alumnado internacional y por abrirse a la formación continua de adultos. La nueva ordenación del sistema universitario permite profundizar en este último aspecto y ayer mismo el Ministerio de Universidades presentó el primer plan para impulsar una oferta “relevante y de calidad” de microcredenciales dotado con 50 millones de euros de los fondos Next Generation –pendientes de la aprobación de la UE– y con la meta de acreditar al menos a 60.000 personas de 25 a 64 años desde 2024 hasta 2026 en todo el Estado y, en concreto, a 3.179 en Galicia.

Se hará con formaciones breves, focalizadas en conocimientos específicos de formato “flexible” –desde un crédito a 15, frente a los 240 de una carrera típica–, con la posibilidad de enseñanza virtual o semivirtual y una estructura modular, como la FP de adultos, lo que permite que valga por sí misma o en combinación con otras, con un “itinerario personalizado”. Uno de los objetivos es “democratizar” el acceso a las facultades y para ello se permitirá que quienes no cumplan los requisitos “tradicionales” para entrar porque nunca estudiaron o plantaron la carrera puedan matricularse en estas microcredenciales acreditando su trayectoria profesional y que además les sirvan de “trampolín” a estudios convencionales.

Transición a la economía verde y del conocimiento

El plan de microcredenciales universitarias (Microcreds) busca “recualificar a la población adulta por las necesidades derivadas del cambio tecnológico” y la transición “verde” y a una economía del conocimiento”, alega Universidades, cuyo titular, Joan Subirats, detecta “carencias significativas” en algunas formaciones, fruto de la colaboración con el sector empresarial. Esa es una de las finalidades de la formación que se impulsará desde enero gracias al plan presentado ayer por el ministro, el presidente del Consejo Económico y Social, Antón Costas, o la presidenta de la CRUE, Eva Alcón.

Un 5% de los estudiantes de grado

En concreto, se persigue llegar a una población “poco presente” en los campus. Son menos de un 5% los estudiantes mayores de 30 años que cursan grados y menos de un 20%, en el caso de los másteres. En Galicia es similar: el dato es del 5,2% en grados y del 23 por ciento en posgrados. El plan de impulso de los microcursos llega en un contexto, además, en el que el porcentaje de mayores de 30 años en el alumnado de nuevo ingreso en Galicia ha caído casi a la mitad desde 2016. De representar el 6,2%, ahora supone un 3,7%.

El plan presentado ayer, y cuyos fondos se repartirán por criterio de población a las autonomías, permitirá financiar planes piloto de minicursos, dotar becas para parados o personas en exclusión y crear una plataforma digital a modo de “ventanilla única” para conocer esta oferta y matricularse. La universidad, destacó Subirats, no solo busca “abrir” sus puertas a todas las edades y dar respuesta a la formación a lo largo de la vida con estructura “más flexibles”, sino que pretende incluir a los campus como proveedores formativos en planes y programas sectoriales dirigidos a la recualificación, en particular en sectores y actividades “estratégicas” tengan déficit de personal cualificado o necesiten del “reciclaje” profesional.

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