La FP es la opción favorita para proseguir estudios frente a Bachillerato y universidad

Casi un 40% de matriculados en enseñanzas posobligatorias en Galicia cursa un ciclo | En el conjunto del Estado predominan en cambio los que optan por acudir a la facultad

Uno de los proyectos expuestos esta semana en el Congreso FP Innova. |   // XOÁN ÁLVAREZ

Uno de los proyectos expuestos esta semana en el Congreso FP Innova. | // XOÁN ÁLVAREZ / C. Villar

Carmen Villar

Carmen Villar

La FP en Galicia está de moda. Mientras en el conjunto del Estado una de cada cinco personas de entre 25 y 64 años cuenta con un título de Formación Profesional, en Galicia esa proporción sube hasta una de cada cuatro. Según el profesorado gallego, la elevada inserción que caracteriza los ciclos y el carácter sobre todo práctico de la enseñanza son los responsables de que en los últimos años haya ido ganando terreno como alternativa, hasta el punto de convertirse ya, en el caso de Galicia, en la opción preferente tras hacer la ESO, muy por delante de Bachillerato e incluso de la universidad, que en cambio es el itinerario preferido cuando se radiografía España como Estado.

Un informe del Observatorio de la Formación Profesional de Caixabank Dualiza le pone números a la progresiva colonización de los ciclos formativos de la enseñanza. Así, mientras en Galicia el porcentaje de alumnos matriculados en este tipo de estudios con respecto al total de los inscritos en enseñanzas posobligatorias alcanza casi un 40% en el último curso analizado, 2020-21, en España su presencia es de alrededor de un tercio. Además, los análisis de la entidad permiten constatar cómo Galicia es la cuarta comunidad –tras Castilla-La Mancha, Baleares y Cantabria– en la que una mayor proporción de jóvenes optan por embarcarse en un ciclo formativo.

En ascenso

Mientras la línea que retrata la evolución de la FP desde el curso 2016-17 mantiene una tendencia ascendente tanto en España en general como en Galicia en particular, a la que refleja la evolución de Bachillerato le ocurre lo contrario. Según los datos del Observatorio, cursan Bachillerato apenas uno de cada cuatro matriculados en estudios posobligatorios y la cifra va a menos. Ya en 2017 la FP le sacaba diez puntos porcentuales en la comunidad y en 2021-21, esa brecha se ha ahondado y ya son 14.

Tampoco le hace sombra la universidad. El informe sitúa en un 34,7% el porcentaje de los matriculados en alguna carrera en Galicia, frente a los 39,9% de FP, mientras en España suponen un 44%. Igual que ocurre con el Bachillerato, el peso de los campus en la matrícula posobligatoria gallega ha ido adelgazando, según al análisis, al menos en los tres últimos ejercicios.

De hecho, el Plan Galego de Financiamento Universitario que está en vigor hasta 2026 recoge de forma explícita que “la bajada demográfica y la competencia de la FP Superior continuarán a continuarán a presionar negativamente la matrícula universitaria”. Con todo, ambos tipos de estudios se intercambian alumnos. y se complementan incluso con convalidaciones Solo en Galicia, alrededor de 11.500 estudiantes se pasaron en siete años del campus a un ciclo por agilizar su incorporación al mercado laboral, especializarse o cambiar de profesión, mientras que uno de cada cuatro titulados en FP se “mudó” a la facultad también para mejorar sus opciones.

La Xunta subraya su apuesta por FP y hace unos días la directora xeral de Formación Profesional, María Eugenia Pérez, defendía que estos estudios fuesen el itinerario formativo “preferente” de los jóvenes gallegos al entender que “responde a las necesidades reales” del territorio.

En febrero el Consello de la Xunta daba luz verde a la creación de 9.500 nuevas plazas en FP en los dos próximos cursos, atendiendo a las necesidades de los sectores productivos y las comarcas, en aras de la conexión de los ciclos formativos y el mercado laboral. Para cumplir con esa meta se han programado contactos con empresas, de las que también esperan mayor implicación para expandir la FP Dual, y se calcula una inversión de 30,7 millones de euros, incluidos los fondos destinados a impulsar la evaluación y la acreditación de las competencias adquiridas mediante la experiencia laboral. Otro de los objetivos es continuar la senda de reducción del abandono educativo temprano, que subió en 2022 tras casi una década de descenso.

De la buena salud de la FP en Galicia dio testimonio esta semana en Santiago el Congreso FP Innova, que se clausuró ayer, en el que se exhibieron 40 proyectos innovadores y una veintena de iniciativas emprendedoras desarrolladas desde los centros. Atrás quedan conceptos desfasados que relegaban estos estudios un plan B. Este curso hay cerca de 61.000 inscritos en algún ciclo de FP, un 75% más que en 2008-2009, con datos de la Xunta. No obstante, las cifras de FP Dual están muy por debajo de la media estatal: son un 2,7% de los matriculados en FP y en España, un 3,84%.

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