Las universidades públicas contribuyen al PIB gallego como la pesca: casi un 2%

Aunque algunos proyectos de reforma del actual Ejecutivo central, como el que afecta a selectividad, se quedarán congelados a la espera de que se clarifique el reparto de poder tras los comicios de julio, uno de los grandes cambios que sí logró completar es la nueva Ley orgánica del Sistema Universitario. Esta reciente normativa establece, entre otras novedades, un plan de aumento del gasto público en educación universitaria de, “como mínimo”, el 1 por ciento del PIB. Frente a las reticencias de algunos ejecutivos autonómicos –incluido el gallego–, que en algún momento cuestionaron de dónde saldrían esos fondos, aunque el Estado se comprometió a elevar su parte, el ministro de Universidades, Joan Subirats, volvía ayer a destacar ese dato para compararlo con el retorno que esas instituciones ofrecen a la sociedad y a la economía y que traduce en alrededor del doble de esa cifra en impacto en el PIB.

En concreto, un estudio sobre la contribución económica de las universidades españolas presentado ayer por el Ministerio de Universidades revela que los campus están generando un impacto total sobre la economía del país del 2,19 por ciento del PIB y, en el caso de las tres universidades públicas gallegas sobre la economía autonómica, ligeramente inferior: un 1,97%, con un peso similar al del sector pesquero con datos del Instituto Galego de Estatística de 2020. Para el Gobierno central, ese impacto “sugiere”, tal y como recoge en un comunicado, que “las universidades están devolviendo más de lo que se invierte en ellas” y de ahí que subrayen su “importancia” para la economía de España y que insten a revertir su “infrafinanciación”.

“Este estudio no hace más que corroborar que la acción política de este ministerio, así como el énfasis que hemos puesto en la mejora de la financiación, no es solo un factor del que se beneficiarán las universidades, sino la sociedad en su conjunto, y que hemos diseñado una Ley que va en el sentido correcto”, alega el ministro. Igualmente, los autores, Jordi Suriñach, Esther Vayá y Joaquim Murillo, de la Universitat de Barcelona, juzgan que, aunque los resultados “subestimen” los impactos totales –porque no se incluyen efectos cualitativos, entre ellos la innovación, y además se trabaja con datos a corto plazo–, se evidencia la “importancia” de la universidad como “generadora de beneficios y de crecimiento y desarrollo” tanto social como económico.

Facturación

Según el resumen ejecutivo del análisis, elaborado desde el punto de vista de la demanda con datos del año 2021 y considerando las funciones de docencia, investigación y transferencia de conocimiento de los campus, por cada 100 euros recibidos de transferencias corrientes estatales y autonómicas, el sistema universitario público español generó 505 euros de facturación, es decir, destacan desde el Ministerio, las universidades públicas multiplican por cinco cada euro invertido en ellas. En el caso de Galicia, esa cifra sería inferior, pero también multiplica esa inversión inicial y conlleva, como en el resto de autonomías, un “muy elevado retorno social” de fondos públicos. La comunidad gallega figura entre las autonomías donde la relación va desde los 368 a los 383 euros por 100 invertidos.

Además, el informe evidencia que la actividad de las universidades públicas en Galicia contribuye a crear o a mantener un total de 21.514 puestos de trabajo en equivalentes a tiempo completo.

Según el trabajo, la facturación total de las tres universidades públicas gallegas fue de 1.918 millones de euros y su contribución al PIB (valor agregado bruto), de 1.123 millones. Las rentas salariales totales suman 721 millones y las rentas fiscales, un total de 422. Esos mismos datos, para España, serían de 41.056 millones de facturación, 23.777 en el PIB, 15.765 en rentas salariales y 8.916 en rentas fiscales. De 100 euros transferidos, revierten 110 en forma de impuestos –de 82 a 84 en Galicia–.

El impacto se relaciona con la concentración de alumnado. Entre Andalucía, Cataluña y Madrid acaparan el 56% del total de estudiantes. Son porcentajes “bastante coincidentes”, apunta el informe, con que alrededor del 61% del impacto económico se concentre en esas tres autonomías. Cataluña (con el 22%), Madrid (21%) y Andalucía (18%) van a la cabeza y Galicia se sitúa en un “segundo nivel”, con un 4,7%, tras la Comunidad Valenciana (10%). Exceptuando Galicia, en el resto de las autonomías citadas, más Canarias, la contribución al PIB es superior al 2,19% estatal. Galicia sería sexta en ese indicador. Aparte, la provincia de A Coruña figura, por ratio de alumnado por cada cien mil habitantes, como sexta “provincia universitaria” de España.

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