Los centros de salud vuelven a la atención presencial: las citas telefónicas caen al 43%

Dos años después de la irrupción de la pandemia, los centros de salud gallegos al fin han recuperado la presencialidad como vía predominante de atención al paciente. La crisis sanitaria supuso un cambio radical en el funcionamiento de la Atención Primaria, pues hubo que restringir la concurrencia de enfermos a los ambulatorios, de manera que la asistencia presencial fue sustituida por llamadas telefónicas. Progresivamente el descenso de casos de COVID permitió abrir de nuevo los centros de salud al público, pero aún así hasta finales del pasado año las citas por teléfono continuaron siendo mayoría: el 62,7 por ciento. Sin embargo, en la actualidad las teleconsultas han caído al 43 por ciento, de manera que la mayoría de las citas vuelven a ser atendidas en persona (57 por ciento).

En todo caso, la atención telefónica ha llegado para quedarse. En 2019, antes de la irrupción de la pandemia, apenas el 11 por ciento de las citas con el médico eran teleconsultas.

Con la pandemia el teléfono prácticamente se convirtió en la principal herramienta de trabajo de los médicos de familia. Sin embargo, las teleconsultas fueron cuestionadas por pacientes y por los propios doctores.

Un 57,8 por ciento de la población española declaró no estar satisfecha con su experiencia con las consultas telefónicas en Atención Primaria, según del Barómetro Sanitario 2022 publicado por el Ministerio de Sanidad. Hasta un 45,8 por ciento de los ciudadanos reconoce que no entiende las indicaciones de su médico igual de bien que si la atención se realizara en persona.

Las consultas presenciales estuvieron restringidas en Galicia hasta septiembre de 2021. A partir de entonces se permitió de nuevo a los gallegos optar por la presencialidad en los ambulatorios, de manera que ahora quienes son atendidos por teléfono es porque así lo han elegido.

Desde la Consellería de Sanidade, sin embargo, dejaron claro que se seguiría potenciando la atención telemática y no se volvería a los niveles prepandemia de atención presencial, cuando nueve de cada diez citas tenían lugar en persona. En todo caso, tras amainar los casos de COVID se plantearon tratar de incrementar gradualmente la atención presencial en Atención Primaria.

Para ello el Sergas llegó a vincular el cobro del complemento de productividad a que los médicos de familia cumplieran con el objetivo de que el 60 por ciento de las consultas fuesen presenciales. Finalmente Sanidade rectificó debido a las protestas del colectivo médico que alegó que no dependía de ellos incrementar la presencialidad en los ambulatorios.

El objetivo de la Xunta era que a finales de 2021 seis de cada diez citas con el médico fueran en persona. Sin embargo, al cierre del pasado año la atención telefónica seguía siendo predominante en Atención Primaria.

De hecho, según las estadísticas del Ministerio de Sanidad, Galicia fue en 2021 la segunda comunidad autónoma con mayor peso de la atención telefónica frente a la presencialidad.

Más de 9.300 gallegos plantan al médico de familia cada semana sin preaviso

De los 16,7 millones de consultas atendidas el pasado año por los médicos de familia del Sergas, un total de 10,5 millones se hicieron vía telefónica, es decir el 62,7 por ciento. Solo en el País Vasco fue mayor el peso de las teleconsultas: el 66,2 por ciento.

Estos elevados porcentajes de atención telefónica contrastan con comunidades como Extremadura o Baleares, donde las teleconsultas fueron prácticamente residuales (2,8 por ciento y 3,8 por ciento, respectivamente). La atención presencial fue predominante también en Aragón, Comunidad Valenciana y Murcia. En España la media de citas atendidas por teléfono en Atención Primaria fue del 52,3 por ciento.

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