Galicia vive desde hace algunos años la revolución de los festivales. La comunidad acoge cientos de eventos de este estilo que se instalan tanto en las grandes ciudades como en los más modestos ayuntamientos. Es casi imposible no caer en la tentación de hacerte con alguna de las entradas, especialmente este año, dada la cantidad de artistas que visitarán la comunidad al ser año Xacobeo.

Pero desde hace algún tiempo los usuarios están con "la mosca detrás de la oreja", y es que no han sido pocos los festivales que se han visto envueltos en la polémica por su mala organización o incluso porque los usuarios llegan a sentirse un tanto "estafados". Desde el Reggaeton Beach Festival de Nigrán, que fue denunciado por la abusiva prohibición de acceder con comida o bebida al recinto; pasando O Son do Camiño que fue criticado por el pésimo funcionamiento de la taquilla o por el precio de las consumiciones.

Ahora, una nueva polémica envuelve a uno de los festivales organizados en Galicia. Se trata del festival coruñés 'Neox Music Day', que se celebró este fin de semana en ExpoCoruña con el patrocinio de la Xunta de Galicia. Este evento de música urbana contaba con un cartel de primera: Bad Gyal, Bizarrap o Rels B fueron algunos de los artistas confirmados.

Pero no es oro todo lo que reluce y han sido bastantes los usuarios que han mostrado su malestar con la organización del festival a través de las redes sociales. Y es que el 'Neox Music Day' cobraba 3 euros a los asistentes para poder salir del recinto. Aunque suene a broma, no lo es para nada. Quien quisiera abandonar ExpoCoruña debía compara lo que llamaron "pulsera de salida".

Esta insólita exigencia ha levantado ampollas entre los asistentes, y muchos han coincidido en tachar de "ladrones" a los organizadores. Comentarios y críticas que han sido compartidas en las rede sociales.

El festival ya estuvo envuelto en la polémica hace unos meses, cuando se pusieron a la venta las entradas. Desde el festival anunciaron que las primeras saldrían a la venta por 20 euros, aunque muchos usuarios no llegaron a comprarlas por ese precio y algunos insinuaban que se trataba de una campaña para aumentar las ventas.

También hubo quejas sobre cambios inesperados en el cartel de artistas y de modificaciones en los horarios de los conciertos.