“La actitud de todos los miembros del PP de Galicia está siendo absolutamente impecable”. El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, quiso aplacar este viernes el creciente nerviosismo en el seno popular ante la sucesión doble que debe afrontarse para cubrir su salto a liderar el partido a nivel estatal. Por un lado, nuevo jefe de filas del PPdeG. Por otro, nuevo presidente del Ejecutivo gallego. En todo caso, garantizó una transición con “tranquilidad y normalidad” por encima de “planteamientos personales”.
PP y Xunta son un hervidero de opiniones, incertidumbre y tensión por el relevo que se va a afrontar. Dieciséis años después de tomar las riendas del partido y trece después de su primera mayoría absoluta (logró cuatro), Feijóo se va a la calle Génova para dirigir el partido a nivel estatal y todavía no se ha concretado qué sucederá aquí, aunque promete que se mantendrá la “estabilidad” en el gobierno.
Todas las miradas apuntan a Alfonso Rueda, vicepresidente primero de la Xunta, como favorito para dirigir el gobierno e incluso el partido, pues los populares carecen de tradición de bicefalia. Esta semana, el barón del PP coruñés, Diego Calvo, evitó apoyarlo en declaraciones a FARO y pidió un congreso orgánico “pronto”. También su homólogo en Ourense, José Manuel Baltar, reclamó un cónclave.
“Tengo que decir que la actitud de todos los miembros del PPdeG está siendo absolutamente impecable"
En el partido crece la creencia de que se abordará primero el relevo orgánico y luego el institucional para evitar que el presidente de la Xunta pueda salir debilitado de un cónclave popular, si bien el PP cuenta con la opción de nombrar nuevo presidente mediante una junta directiva. “Ambas opciones son perfectamente válidas”, respondió a la prensa Feijóo desde A Coruña, donde se celebró el Consello de la Xunta.
Ahí rebajó tensiones y trató de atajar suspicacias sobre las declaraciones de los barones de A Coruña y Ourense. “Tengo que decir que la actitud de todos los miembros del PPdeG está siendo absolutamente impecable. Me ayudaron a ser presidente de la Xunta y del partido mucho tiempo”, inició. “Están colaborando todos con la transición repentina, pero llena de normalidad y tranquilidad democrática”, añadió.
En este punto, reconoció que ha iniciado conversaciones en el partido sobre las fórmulas para encarrilar su relevo, especialmente con los barones provinciales. Aunque no ha hablado con todos, usará estos días previos a la Pascua para recibir sus impresiones de primera mano.
Además, evitó responder a la pregunta de si quiere que la misma persona lo releve al frente de Xunta y de PPdeG y aseguró que el nuevo presidente del Ejecutivo será el que decida si mantiene el gobierno actual. Eso sí, lo ensalzó: “Es el mejor que he tenido en 13 años”.
Por su parte, la oposición criticó de nuevo esta transición. “No puede tener a un presidente a tiempo parcial ni a un gobierno paralizado” que está “más pendiente de la sucesión interna del PP que de los problemas que tiene la ciudadanía”, declaró Ana Pontón (BNG). El líder socialista, Valentín González Formoso, urgió una transición rápida y criticó un proceso marcado por el “dedazo” de Feijóo.
Plan para movilizar 5.000 millones en investigación
La Xunta aprobó en su reunión semanal la estrategia de especialización inteligente (RIS3) hasta 2027 para tratar de movilizar casi 5.000 millones de euros públicos y privados. Su objetivo es “avanzar hacia una Galicia sostenible y digital”, propiciando avances científicos y tecnológicos en “sostenibilidad y digitalización” en campos como la alimentación, la salud o el envejecimiento activo. El titular de la Xunta señaló como objetivo triplicar el porcentaje de empresas innovadoras que la comunidad presenta en la actualidad, tanto en productos como en procesos. La anterior RIS3 (2014-2020) logró “el incremento en un 34% de la inversión en I+D” y la concesión de 6.700 ayudas que movilizaron 1.900 millones. En el ámbito tecnológico, la Xunta dio luz verde también a un gasto de 10 millones para aumentar la capacidad de almacenamiento de datos de la administración autonómica.
