El pasado 22 de diciembre entró en funcionamiento la conexión entre Ourense y Madrid mediante alta velocidad ferroviaria, pero la infraestructura dista de su conclusión. En la lista de tareas pendientes figuran la entrada en funcionamiento de los trenes Avril, que reducirán 20 minutos los tiempos de conexión, y la construcción de un cambiador de ancho de vía para permitir que los trenes AVE puros puedan circular más allá de la ciudad de As Burgas, lo que permitiría aumentar la oferta e incluso atraer a posibles operadores privados. En el primer caso, los nuevos convoyes de Talgo comenzarán a operar en verano. En el segundo, el Ministerio de Transportes aceptó ayer negociar con la Xunta la ubicación del cambiador entre Ourense, como propone el Gobierno, o Santiago, como quiere el Ejecutivo gallego para no perjudicar a la ciudad de Vigo.

Estas son algunas de las conclusiones del primer encuentro mantenido entre la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ayer en Santiago. Durante tres horas y media, abordaron los proyectos pendientes en la comunidad escoltados por altos cargos como la presidenta de Adif y su homólogo de Renfe o las conselleiras de Medio Ambiente e Infraestruturas.

En la actualidad, los dos servicios diarios de trenes S-112, es decir, de AVEs puros solo llegan a Ourense mediante un ancho de vía internacional. A partir de ahí, funciona un ancho ibérico. El Gobierno prevé instalar en esa ciudad un cambiador para facilitar la circulación, pero la Xunta reclama ubicarlo a las puertas de Santiago, en la localidad de Angrois. De esa forma, los S-112 llegarían directos a la capital gallega. La obra costaría unos 40 millones de euros y necesitaría un año, según la Xunta. Obligaría a modificar el ancho de vía entre Ourense y Santiago. De otro modo, esos trenes puros finalizarían en la ciudad de As Burgas y solo seguirían circulando los Avril, con capacidad automática para adaptarse al ancho ibérico.

“Nosotros entendemos que la salida de Ourense es la mejor alternativa técnica y la Xunta traslada otro análisis. Nos hemos emplazado a un análisis conjunto”, resumió la ministra de Transportes.

Feijóo urgió a la puesta en marcha de los Avril “mejor en junio que en septiembre” para “cumplir los tiempos de conexión con Madrid” y aumentar la competitividad de una línea que está ya generando demanda. “Sería lo deseable y todos queremos que lleguen lo antes posible, pero las pruebas de homologación requieren su tiempo”, se excusó Sánchez.

La demanda, de momento, crece en este servicio. Los viajeros entre Galicia y Madrid aumentaron un 67% en el primer mes de vida del AVE entre ambas comunidades hasta alcanzar las 100.000 personas.

Menos concreción existió alrededor de dos proyectos claves para Vigo, como son la salida sur desde la ciudad hacia Portugal para completar todo el Eje Atlántico hasta Porto y la variante de Cerdedo, que permitiría enlazar la ciudad olívica directamente con Ourense, dándole una salida hacia Madrid sin necesidad de pasar por Santiago.

“Seguimos adelante con la variante de Cerdedo, no se ha cuestionado”, respondió Sánchez a la prensa sobre una cuestión pendiente de finalizar el estudio hidrológico.

En el caso de la vía hacia Portugal, se creará un comité técnico mixto entre el Gobierno y la Xunta, según avanzo Feijóo, para “estudiar esa salida sur, así como un ramal hacia el puerto de Vigo”. “Quedamos en darle prioridad a un proyecto estratégico para España y Portugal”, sostuvo Feijóo.

Licitarán la nueva estación de Ourense antes del mes de julio

En el terreno ferroviario, Feijóo celebró también el compromiso para la licitación durante el primer semestre del año de la “primera gran estación del AVE” en Galicia, la de Ourense, con un presupuesto de “entre 130 y 140 millones”. Este proyecto conlleva también la decisión sobre dónde situar el cambiador de vía, si en la ciudad de As Burgas o en la entrada de Santiago, como reclama la Xunta.

Las demandas en la red viaria también centraron gran parte de las reclamaciones de Feijóo. “Hay obras proyectadas hace 20 años aún pendientes”, lamentó. En este terreno, Transportes someterá en breve a información publica un tramo de la A-74 entre Foz y Burela y finalizarán el año próximo el tramo entre Melide y Palas de la autovía entre las ciudades de Lugo y Ourense.


En febrero lanzan el contrato para la conexión de Langosteira

El Ejecutivo central licitará el mes que viene la conexión ferroviaria del Puerto Exterior de A Coruña, en Punta Langosteira (Arteixo), lo que “permitirá impulsar la intermodalidad marítimo-terrestre”, según expuso Raquel Sánchez. En marzo del año pasado, su antecesor, José Luis Ábalos, ya avanzó la intención de impulsar el proyecto, aprobado en 2018 y que supone una inversión aproximada de 140 millones de euros. Permitirá construir una línea de casi siete kilómetros entre Punta Langosteira y el Corredor Atlántico de mercancías, dando salida a la infraestructura portuaria comprometida tras el Prestige.

El Gobierno descarta ampliar la rebaja en los peajes al tramo Puxeiros-Porriño

La ministra de Transportes esgrimió los 2.300 millones que le costarán al Gobierno las bonificaciones de los peajes en la Autopista do Atlántico (AP-9) hasta que expire la concesión en 2048 para dar un portazo a la extensión de esas rebajas, anulando, por ejemplo, los peajes entre Puxeiros y Porriño. “Estamos centrando recursos en ese sentido en la AP-9”, respondió Sánchez a preguntas de la prensa sobre la demanda de rebajas en ese tramo para liberar la autovía A-55. La reunión entre Sánchez y Feijóo se saldó sin concreción sobre la demanda gallega para lograr la titularidad de la AP-9, una vía a examen. Sus prórrogas de concesión en 1994 y 2000 han sido puesto en tela de juicio por la Unión Europea. La justicia comunitaria entiende que esas prórrogas deberían haberse autorizado mediante nuevos concursos y no de forma directa. A días de expirar el plazo de dos meses concedido por la Comisión Europea para justificar esas decisiones, Sánchez confirmó que ya han remitido las alegaciones: “Se ha contestado, pero no puedo adelantar más porque es información reservada”. Feijóo también aseguró que el ministerio “estudiará” la ampliación de la conexión Vigo-Porriño para “no abrir otra autovía” que costaría 350 millones. Sobre el plan de cobro en autovías, Feijóo rechazó una precio por kilómetro porque castigaría a las regiones periféricas y abogó por una tarifa plana. Sánchez buscará un sistema “justo” negociado con las comunidades.

Raquel Sánchez promete designar al comisionado para el Corredor Atlántico

El Gobierno prometió a la Xunta la designación en breve del comisionado del Corredor Atlántico de mercancías, una decisión “comprometida por el equipo anterior” de Ábalos, anunció Feijóo tras su reunión con Raquel Sánchez. Ese cargo debe asumir la dirección de los planes para potenciar la infraestructura, llamada a ser el enlace de Galicia y Portugal con el mercado europeo. Tras las exclusión inicial, el Gobierno finalmente incluyó el proyecto en la red ferroviaria europea, lo que le abre la puerta a acceder a financiación extra y evita que los puertos gallegos queden al margen de la conexión con ese mercado. Sin embargo, el retraso respecto al Corredor Mediterráneo es palpable. De hecho, en julio de 2018 se nombró a Josep Vicent Boira comisionado de ese proyecto, lo que ilustra las diferencias de tiempos. En marzo del año pasado, este cargo presentó el sistema de información geográfica del eje y el plan de desarrollo económico. En el caso atlántico, ni siquiera se cuenta con responsable.

Ley de Vivienda

En el encuentro también se abordó el anteproyecto de Ley de Vivienda del Gobierno, que ha cuestionado el Consejo General del Poder Judicial por vulnerar competencias autonómicas. “Le hemos trasladado nuestras cautelas en relación sobre el texto actual, que no sabemos si cambiara, y el deseo de cogobernanza”, alertó Feijóo.