La Consellería de Sanidade rebajará el próximo año un 12 por ciento el gasto en peonadas, que son los pluses que se paga al personal sanitario para compensarlos por operar en jornada de tarde. Se trata de un mecanismo al que se recurre habitualmente para descongestionar las listas de espera. De hecho, en 2021 el Sergas incrementó hasta los 9,2 millones de euros los pagos para realizar intervenciones en horas extra, después de que se disparase la demora media para entrar a quirófano debido a la crisis sanitaria originada por el coronavirus. Sin embargo, para 2022 el desembolso en peonadas retorna a niveles preCOVID pese a que los pacientes gallegos todavía aguardan casi 14 días más para ser operados que antes de la pandemia.
El proyecto de Presupuestos de Galicia para 2022 contempla una partida de 8 millones de euros en el concepto “Productividad factor variable. Programas Especiales” que, según explican desde la Consellería de Sanidade, se refiere a “la actividad de autoconcertación y jornadas de tarde”. Son 1,2 millones de euros menos que la prevista en las cuentas de este año
Las peonadas, en todo caso, no están exentas de polémica, pues el Consello de Contas había denunciado su abuso durante la época del Gobierno bipartito. Tras sus críticas se sugería que podrían estar desplazándose operaciones al horario de tarde para cobrar el correspondiente plus por tratarse de jornada extraordinaria. Con la llegada del PP a la Xunta, se tomó nota y se propusieron reducirlas al mínimo, al tiempo que se intensificó la actividad quirúrgica por las mañanas.
A pesar de ello, el gasto en peonadas creció en los últimos seis años. Si en 2015 se destinaban 7,4 millones, en 2020 se elevó a 8,1 millones y finalmente en 2021 esta partida creció un 15 por ciento hasta los 9,2 millones.
La razón del incremento registrado este año es el aumento de la espera quirúrgica en el Sergas. El COVID obligó en 2020 a aplazar operaciones disparando la demora media.
Además de incrementar las peonadas, el Sergas puso en marcha este año un plan de choque para atajar estas listas de espera, dotado con 15 millones de euros, con el que pretende agilizar la atención de 230.000 pacientes. Para ello, además de ampliar la actividad del Sergas al horario de tarde, se implantó el modelo de “hospital único”. Esto significa que si no hay disponibilidad para atender a un paciente en su centro de referencia podrá ser derivado, siempre de forma voluntaria, a cualquier otro hospital del Sergas.
La Consellería de Sanidade ha conseguido reducir las esperas respecto a 2020 gracias a este mayor esfuerzo. En junio la demora para ser intervenido se situaba en 70,2 días, 30 menos que un año antes. A pesar de ello, el tiempo que deben aguardar los gallegos sigue estando por encima de los niveles prepandemia, cuando se tardaba 56,4 días en llamar a quirófano a los pacientes. El Sergas advirtió que hasta 2022 no se volverá a niveles prepandemia en las listas de espera.
Sin embargo, el gasto en peonadas retrocede de cara al próximo año y se sitúa en 8 millones, una cifra similar a la de antes del COVID. Según consta en el proyecto de Presupuestos para el próximo año, 4,2 millones de euros se destinarán a compensar a los trabajadores sanitarios del hospital por operar en jornada de tarde. Pero también en los ambulatorios se realizan intervenciones de cirugía menor: la previsión es gastar en la actividad extraordinaria de tarde en Atención Primaria casi 3,8 millones de euros.
Las peonadas forman parte de los “incentivos al rendimiento” que paga Sanidade a sus profesionales y que incluyen todos los pluses para “remunerar el especial rendimiento, el interés o la iniciativa en el desempeño de los profesionales” y que ascenderán a 183,1 millones de euros en 2022. Por otro lado, las guardias de los profesionales del Sergas en 2022 costarán 47,8 millones de euros.
