Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Feijóo pone deberes a Casado y le pide un “cambio de ciclo en el PP" para alejarse de Vox

Feijóo y Pablo Casado Ricardo Rubio/E. P.

Como quien apaga la música en el momento álgido de la fiesta para recordar que hay que recoger todo y que cada mochuelo se vaya a su olivo, el presidente de la Xunta y del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, irrumpió en el debate interno de su partido, eufórico tras las elecciones autonómicas de Madrid en las que Isabel Díaz Ayuso barrió a sus oponentes y se situó a cuatro escaños de la mayoría absoluta. Para el dirigente gallego, soplan vientos de cambio, pero primero urge aplicar un cambio de estrategia interna. “Me gustaría que en el PP hubiese un cambio de ciclo político y fuésemos otra vez hacia una política más occidental, más europea, más previsible, en un momento en que se necesita subir un poco el listón de la política”, reclamó ayer en declaraciones a Radio Euskadi durante una visita a Bilbao.

Sus palabras le agriaron la alegría al partido al poner de relieve su exigencia de un cambio de tercio, del alejamiento de planteamientos radicales y, sobre todo, de Vox. Como, recordó, hizo él en Galicia, donde el partido de Abascal carece de representación política institucional a todos los niveles. “Vox no ha venido a solucionar ningún problema a nuestro país”, alertó mientras Ayuso mantiene equidistancia con los de Abascal e incluso no cierra la puerta a cumplir la exigencia de este de presidir la Asamblea de Madrid a cambio de su apoyo.

Sus palabras constituyen un toque de atención para el líder de su partido, Pablo Casado, que pasó de romper con Vox (“Hasta aquí hemos llegado”, dijo en el Congreso) a mantener equidistancia en Madrid y reivindicar a Ayuso como modelo. Para Feijóo, situar al PP en la Moncloa pasa por “aglutinar al centroderecha” y fagocitar a Vox, no aliarse, como en Galicia. “Ese es el modelo y a única fórmula de volver a elevar” la política, sostuvo en una intervención en la que reiteró que apoyará “incondicionalmente” a Casado para “cambiar el Gobierno de España”.

Recordó de nuevo que renunció a su oportunidad de optar a liderar el partido a nivel estatal, aunque esa opción se mantiene abierta si Casado no confirma esos vientos de cambio y sucumbe de nuevo en la que sería su tercera derrota en unas elecciones generales.

El ejemplo de Portugal

Casado esquivó el debate abierto por Feijóo, respondiendo desde Zaragoza que el cambio político en España es “imparable” y comenzó el 4-M, vinculando las peticiones de Feijóo al Gobierno central y no al partido que dirige, como él expuso ante el comité ejecutivo del partido hace una semana, informa Efe.

El presidente del PP quiso evitar polémicas internas en un momento de euforia y aseguró que el cambio que necesita España pasa también por “políticas europeístas”, en sintonía como gobiernos conservadores como Alemania, Austria o Grecia, pero también con Portugal, donde gobierna la izquierda. “Hay que apostar por políticas que generen oportunidades, bajen impuestos, ayuden a la gente que lo pasa mal. El cambio de ciclo es imparable. El PP cree en Europa, en el municipalismo, y queremos políticas económicas responsables”, declaró a los medios Casado.

Compartir el artículo

stats