La modernización del Corredor Atlántico aún está en fase embrionaria, pero Adif va dando pequeños pasos. El ministro de Transportes, José Luis Ábalos, intentó esta semana disipar dudas sobre un trato de favor al Corredor Mediterráneo y se comprometió a “igualar” las inversiones. Y ayer la presidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera, avanzó que para los próximos tres años se contempla una inversión de 202 millones de euros en la línea de mercancías entre Ourense y Monforte.
La conexión, que permitirá dar salida a las mercancías de los puertos gallegos hacia el resto de Europa, conecta con la Meseta a través precisamente de la línea Ourense- Monforte que luego discurre hacia León. Este corredor, que en un principio, no tenía acceso preferente a financiación europea por no estar incluido en la Red Transeuropea de Transporte, se considera ahora prioritario, si bien el Gobierno aún no ha detallado los proyectos que aspiran a captar fondos de la UE.
Desplome de tráficos
Se trata de impulsar el transporte ferroviario de mercancías, que se ha convertido en algo testimonial con una caída de tráfico del 43 por ciento en cinco años debido a que las infraestructuras están obsoletas con trazados inadecuados que no permiten circular a los trenes más largos ni ganar en velocidad y líneas sin electrificar...
En una visita a Lugo, la presidenta de Adif detalló las actuaciones previstas en el corredor de mercancías Ourense-Monforte, de 46 kilómetros. Así se elevará a 25 kilovoltios la electrificación de la línea y se ampliarán vías en el Puerto Seco de Monforte y Os Peares para que permitan la circulación de trenes de 750 metros de largo.
En total, Adif prevé un total de veinte obras hasta 2023 en la línea Ourense-Monforte del Corredor Atlántico. Ya están adjudicados los contratos para reparar desmontes y reparar 23 puentes. En proceso de licitación están diversos contratos de tratamientos de puentes, túneles y explanaciones, así como la renovación de la vía y de la catenaria. Y en fase de proyecto está la supresión de cinco pasos a nivel.
Competitividad
Las ventajas de la nueva electrificación, que pasará de 3 kilovoltios a 25 kilovoltios, serán “una mayor competitividad del ferrocarril, reducción de costes operativos y aumento de las prestaciones”, según explica Adif. Además se podrán reducir tiempos de viaje.
Además de los 202 millones de euros que se invertirán en el tramo Ourense-Monforte, el ente gestor de infraestructuras prevé otros 343,9 millones de euros para mejorar la línea entre Monforte y Lugo para implementar la conexión de alta velocidad a la capital lucense.
Pardo de Vera apuntó que con estas obras se avanza en la “cohesión territorial” que supone la movilidad y que es “un elemento transversal para el tejido productivo, el turismo, la cultura y el conocimiento”.
