La Consellería de Sanidade revisará el coste de la medicación de enfermos de esclerosis múltiple, VIH y leucemia mieloide crónica a más de 3.000 pacientes. Es uno de los objetivos fijados para este año por el departamento de Rocío Mosquera en materia de ahorro farmacéutico. Según explicó ayer el director xeral de Asistencia Sanitaria, Félix Ruibal, se evaluarán los tratamientos que se dispensan en todos los hospitales para estas patologías y se fijará un coste medio "para que aquellos que estén por encima analicen sus procesos y por qué sus pacientes resultan más caros".

Sanidade ha elegido estas tres dolencias -la leucemia mieloide, el VIH y la esclerosis- porque requieren tratamientos "de alto impacto económico", según Ruibal. Y porque además han detectando "una gran variabilidad en los hospitales", es decir, hay mucha disparidad entre los fármacos que se le dispensan a estos pacientes en función del médico y del área hospitalaria.

El Sergas reconoce que hay diferencias "inexplicables" en los tratamientos y asegura que no son achacables a la heterogeneidad del paciente sino a la práctica de los médicos.

"De lo que se trata es de buscar la homogeneidad y de trabajar el coste por paciente en estas tres patologías", explica Ruibal.

Para ello se evaluará cuánto cuesta cada uno de estos paciente al sistema sanitario en los distintos hospitales. Esta comparación permitirá a Sanidade fijar "un criterio medio". "Algunas áreas hospitalarias ya la cumplen y otras tendrá que converger con la media", explica Ruibal.

"Todos los profesionales de todos los centros deberán revisar sus protocolos terapéuticos", insiste el director xeral de Asitencia Sanitaria.

Los costes de los pacientes de esclerosis múltiple, VIH y leucemia mieloide crónica son abultados. "Por encima de los cinco dígitos", señala Ruibal. En concreto, un enfermo de leucemia puede suponer un gasto anual para el Sergas de más de 30.000 euros. En el caso de las otras dos patologías se superan los 10.000 euros.

Aunque el Sergas no precisa el número exacto de pacientes afectados por estas dolencias en Galicia, el director xeral de Asistencia Sanitaria calcula que estarán entre los 3.000 y los 4.000.

El hecho de que sea un número reducido de pacientes facilitará la revisión de sus tratamientos, que son además de dispensación hospitalaria.

Sobre los fármacos que se recogen en los hospitales todavía está pendiente de aplicarse el copago. Aunque la Xunta había anunciado que lo implantaría ya el pasado mes de enero, finalmente ha decidido aplazarlo a la espera de que lo pongan en marcha en el resto de las comunidades autónomas.El Sergas defiende que tiene que haber un desarrollo homogéneo de esta medida en toda España. Cuatro autonomías -Canarias, Asturias, País Vasco y Andalucía-han recurrido, sin embargo, el copago hospitalario ante el Contencioso Administrativo.