El pasado ha sido el ejercicio de la salida de la recesión, como confirmaba el Instituto Galego de Estadística (IGE) esta semana. El Producto Interior Bruto (PIB) de la comunidad logró crecer el último trimestre un 0,1%, al igual que sucedió entre julio y septiembre, y cerrar el año con una caída global del 1,1% frente al 1,2% del conjunto del Estado. ¿Suficiente para contener el deterioro laboral?

Según Adecco, una de las principales Empresas de Trabajo Temporal (ETT) del país, la comunidad mejoró tanto en salarios como en oportunidades de empleo, aunque la conflictividad laboral aumentó. En su monitor autonómico, Galicia avanzó dos posiciones, hasta situarse en el décimo tercer lugar, apoyada por, según la compañía, un "pequeño incremento" en el salario medio y la reducción de los accidentes laborales, algo excepcional entre todas las regiones.

Galicia mostró el año pasado "un importante progreso" en remuneración, tras pasar del puesto décimo sexto al décimo segundo. El salario medio se incrementó un 0,7%, lo que situó a la comunidad entre las cinco que mejoran su salario medio ordinario, donde se excluyen horas y pagas extra y sin tampoco tener en cuenta deducciones y retenciones. En Galicia asciende, según la ETT, a 1.444 euros.