El presidente del Gobierno prosigue sus vacaciones familiares en Ribadumia (Pontevedra) y su caminata a buen ritmo por Armenteira se ha convertido ya en rutina. Así comienza la jornada desde que el pasado sábado por la tarde llegó a la casa de turismo rural donde se aloja con su esposa y sus dos hijos. A primera hora de la mañana y cuando el calor aún no aprieta, acompañado siempre de su amigo José Benito Suárez, marido de la ministra de Fomento, Ana Pastor, y presidente de la Autoridad Portuaria de Marín, recorre a buen paso los seis kilómetros de la ruta da Pedra e da Auga en los municipios de Meis y Armenteira, y en menos de cuarenta y cinco minutos se planta a las puertas del monasterio de Armenteira.

Ayer era jornada festiva en Galicia, y el líder del PP se lo tomó con más calma. No la marcha, que no aminoró el ritmo, sino el desayuno que disfrutó en el Bar O Comercio, parada obligada en la visita al recinto monacal. Desayunó algo de fruta en la terraza del local y se relajó con una charla animada, tanto que no abandonó el lugar hasta las doce del mediodía, cuando en días pasados el café se prolongaba como mucho una hora. Ayer la tertulia fue de casi dos horas y Rajoy la coronó fumándose un puro, al que es tan aficionado, según vecinos de Armenteira que fueron testigos del buen momento que pasó el presidente.

Aunque un entrenador personal no le recomendaría tras una caminata de seis kilómetros inhalar el humo de un puro, pues los alveolos de los pulmones están más abiertos y son más receptivos a atrapar la toxicidad del puro, lo cierto es que Rajoy ayer hizo una excepción, quizás por ser día de fiesta, y disfrutó de un puro.

A la mesa estaban sentados, aparte de José Benito Suárez, también el presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, y Javier Guillén, director general de la Vuelta Ciclista a España, cita que arranca el día 24 en Vilanova de Arousa. Como gran aficionado al ciclismo, seguro que uno de los temas de conversación, fue este deporte.

Solo dos mujeres interrumpieron el momento, pidiéndole dos autógrafos, y el presidente accedió. Rajoy intenta descansar y recargar pilas ante el curso político que se le avecina. El escándalo Bárcenas, con las declaraciones ante el juez de Álvarez Cascos, Javier Arenas y Dolores de Cospedal, no parece menguar, y la recuperación económica se hace esperar,. Sigue latente el conflicto diplomático con Reino Unido a cuenta del Peñón de Gibraltar.