En un paraje junto al río Deza se alza el monasterio de Carboeiro, cenobio benedictino fundado a principios del siglo X sobre los restos de una antigua ermita. Se trata de una de las obras cumbre del románico ojival en Galicia, con la influencia del maestro Mateo y de su escuela en dos de sus portadas. Del cenobio parte un sendero señalizado y acondicionado hacia las cataratas del río Toxa.
