El PSOE votó ayer con el PP en el Senado en una moción de los populares en defensa de la unidad de España, aunque entre reproches mutuos por el papel del anterior Ejecutivo y del actual Gobierno respecto a la crisis catalana, muy presente en los discursos de todos los portavoces.

El día después de la Diada, la senadora del PP Clara San Damián acusó al PSOE de "arrodillarse" ante los independentistas cuando más redoblan su desafío y les culpó de propiciar la deriva soberanista desde 2007, cuando el entonces presidente José Luis Rodríguez Zapatero garantizó que no iba a tocar ni una coma del Estatut reformado.

Por su parte, el portavoz del PSOE, Marcelino Iglesias, echó en cara al PP su incapacidad para el diálogo, recordó el valor de que tuvieron los "padres" de la Constitución al ceder todos para poder aprobar la Carta Magna y emplazó a los populares a dar "un paso más" y practicar el diálogo además de hablar de la unidad de España. Cs logró incluir en el texto del PP una enmienda para pedir también al Gobierno que impida el uso de fondos públicos para promover cualquier referéndum de secesión.