La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, hizo anoche una comparecencia sin preguntas en la que anunció que el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, reunirá a las nueve de la mañana de hoy, miércoles, al Consejo de Ministros para analizar las próximas medidas que adoptará en la crisis catalana.

El Gobierno ha pedido además el aplazamiento de la sesión de control del Congreso hasta las once de la mañana, para poder celebrar a primera hora ese Consejo de Ministros. La vicepresidenta explicó que Rajoy está en contacto con los principales dirigentes políticos porque quiere el "máximo consenso". Anoche, el líder del PSOE, Pedro Sánchez, se desplazó al palacio de La Moncloa para tratar con el jefe del Ejecutivo cómo responder a la comparecencia de Puigdemont. También estaba prevista una reunión con el líder de Ciudadanos, Albert Rivera.

En su comparecencia, Sáenz de Santamaría advirtió que el Ejecutivo no puede aceptar que se dé validez a la Ley de Referéndum ni a la Ley de Transitoriedad, como tampoco al referéndum del 1 de octubre ni que se constate por parte de nadie en el Parlament que la mayoría de los catalanes quiere un Estado independiente.

La vicepresidenta acusó al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, de haber sumido a Cataluña en "su mayor nivel de incertidumbre", con un discurso de alguien que "no sabe dónde está, a dónde va ni con quién quiere ir".

También advirtió que Puigdemont no puede pretender "imponer" una mediación porque el diálogo solo es posible si se respetan las reglas del juego.

El deliberadamente confuso discurso de Puigdemont ya había sido acogido, dos horas antes, con rechazo por Moncloa a través de unas declaraciones atribuidas a fuentes de la Presidencia del Gobierno. En ellas, se aseguraba que el Ejecutivo central estima inadmisible "hacer una declaración implícita de independencia para luego dejarla en suspenso de manera explícita".

Poco después, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, aseguró que el Ejecutivo "no puede dar como válido" lo ocurrido ayer en el Parlament, incluyendo una "no declaración de independencia cuya suspensión se solicita inmediatamente".

Pasadas las once y media de la noche, el secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, hizo unas declaraciones en la que consideró que "ahora mismo la situación en Cataluña es de auténtica ingobernabilidad. Que nos diga el señor Puigdemont en que marco de legalidad se mueve", añadió. Ábalos anunció que las decisiones que haya que tomar se tomarán hoy, en clara alusión a la reunión del Gobierno y posterior comparecencia de Rajoy en el Congreso. Respecto a Puigdemont, le pidió que "no esconda en la indefinicion el verdadero propósito de su declaración".