Fandicosta lanza un ERTE para todos sus centros de producción

El compás de espera para dilucidar el futuro de todos los activos de Fandicosta trae de la mano un parón también para la plantilla. La pesquera, en preconcurso de acreedores desde el pasado octubre, cuando salieron a la luz sus graves problemas de caja por, pretende aliviar la escasez de liquidez con un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) en todos sus centros de producción. Supera los 200 trabajadores. La compañía ha iniciado formalmente los trámites, según desveló ayer CC OO, sin que todavía se sepa a cuántos efectivos afectará y en qué condiciones.

La negociación en la fábrica de Domaio arrancará el próximo martes día 5 a las 10.00 horas. En esta primera reunión, los representantes de los trabajadores dan por hecho que la dirección del grupo entregue la copia de toda la información que se necesita para recibir la aprobación de las autoridades laborales: la memoria explicativa con la que justificarán las causas, la duración y el personal afectado. “Mientras tanto –se quejan desde CC OO–, seguimos sin respuesta de ningún tipo por parte de la Xunta por la reunión solicitada de manera urgente el 17 de octubre, pese a que forman parte del capital de la empresa con un 12%”.

Ofertas

En paralelo, Fandicosta se encuentra en pleno proceso de revisión de las ofertas que recibió por su negocio. Hay, como adelantó FARO, propuestas de compra en firme de Wofco e Interatlantic. Aunque la cúpula llegó a señalar el inicio del nuevo año como fecha tope para materializar la reestructuración, en las reuniones con los interesados se habla abiertamente de intentar encarrilar la operación antes de que acabe el actual ejercicio, en línea con los tres meses de margen que contempla la ley concursal. La otra razón del apuro es la situación económica. Y la decisión de ir adelante con un ERTE incide en esa misma línea, permitiendo a Fandicosta aligerar los gastos de personal mientras esté activo.

Según fuentes consultadas por Europa Press, la empresa continúa tratando de renegociar su deuda con cuatro bancos.