El matorral y los pies quemados de eucalipto que rebrotaron con fuerza tras los incendios que asolaron la zona en 2017 obligaron a la Comunidade de Montes Veciñais en Man Común de Queirugás, A Rasela, Vilela y Tintores, en el concello ourensano de Verín, a limpiar a fondo el terreno antes de darle una segunda vida. Fueron dos fuegos en un intervalo de tiempo muy corto –agosto y finales de septiembre– que destruyeron completamente la gran masa boscosa, insuficientemente madura en aquel momento, lo que provocó una regeneración natural irregular en los años siguientes. La plantación sustituta finalizó en mayo de 2021. Casi la totalidad de la superficie, 138,85 de las 139,85 hectáreas totales, tienen pino gallego ahora y en el resto se pusieron abedules. Es la mayor "bolsa verde" certificada que existe en España para compensar la huella de carbono.
En 2014 se habilitó un registro voluntario en el que empresas y otras organizaciones, también del sector público, pueden calcular el impacto de sus emisiones de dióxido de carbono (CO2) directas e indirectas e impulsar o apoyar algún proyecto que mitigue su impacto. ¿Cómo se cuantifica? Hay dos opciones. Con la información mínima, que radiografía el consumo de combustibles en los edificios, las fugas de gases refrigerantes fluorados en equipos de climatización o refrigeración y las emisiones vinculadas a la demanda eléctrica de la compañía. O se puede ir más allá e incorporar las emisiones de los viajes de trabajo con medios externos, los servicios subcontratados (gestión de residuos, limpieza o seguridad, por ejemplo), la compra de productos y otras partidas básicas.
Un 80% más
La cada vez mayor concienciación por la sostenibilidad disparó en 2021 el número de “organizaciones” inscritas en el registro: 673, un 80% más que el ejercicio anterior, según el reciente balance del Ministerio para la Transición Ecológica. Alrededor de la mitad (330) son compañías de la industria manufacturera. Hay 227 constructoras y 226 organismos de la administración pública, entre las actividades destacadas. El total de inscripciones supera las 2.000, de las que 70 están en Galicia y suman entre ellas 235 huellas de carbono.
A la misma velocidad avanzan los proyectos registrados para compensar las emisiones. Se multiplicaron por cinco en 2021, “un incremento muy llamativo” que Transición Ecológica achaca “al apoyo que desde Galicia se ha dado para la inscripción de proyectos en esta comunidad autónoma”. Solo aquí se formalizaron 85. Casi el 70% suponen un cambio de uso del suelo –antes agrario, improductivo o matorral– y el otro 30% de la iniciativas se lleva a cabo sobre terrenos forestales que sufrieron un incendio y tratan de devolver a los montes la capacidad de absorción de CO2 a través de los árboles.
1, 2 millones de toneladas
Más de un centenar de proyectos se desarrollan en terrenos privados y 58 en suelo público, “todos ellos propiedad de ayuntamientos”. La superficie media aumentó de 13 a 21 hectáreas y el periodo de permanencia medio alcanza los 39 años, muy por encima de los 30 de mínimo necesario. Ocho de cada diez apuestan por plantaciones mixtas, “siempre con especies propias del entorno”, subraya el informe. Los impulsores tienen la obligación de contar con un plan de gestión de la masa forestal.
La “bolsa verde” supera las 1,2 millones de toneladas de CO2 para compensar en los años de vigencia previstos, a la espera de la próxima actualización con los proyectos preinscritos ya para facilitar el apoyo de los interesados en compensar su huella de carbono en la propia replantación. Cumplen “todos o gran parte de los requisitos de inscripción pero cuya ejecución, y consecuente inscripción, se retrasará por un periodo máximo de dos años”.
“De este modo –argumentan desde el ministerio– se facilita el contacto entre las organizaciones interesadas en compensar y los proyectos que buscan un apoyo económico adicional para su puesta en marcha”. Dos se localizan en Galicia: el proyecto de la Comunidad de Montes Veciñais en Man Común de San Miguel de Tabagón, en O Rosal, para restablecer la masa de pino tras un incendio (7.631 toneladas de CO2 de absorción); y la plantación de pino también por parte de la Comunidade de Montes Veciñais de Man Común de Paradela de Bemil, en Caldas de Reis (9.330 toneladas de CO2).
Los proyectos en Galicia
El de Verín fue uno de los últimos en incorporarse y por sí solo supone el 9% de la capacidad de absorción de todos los proyectos en marcha en el país. Se registraron también plantaciones en Baltar, O Irixo, Silleda, O Saviñao, O Barco de Valdeorras, Lalín, Rianxo, Bóveda, Boborás, Sobrado, As Neves, Gondomar, Salceda de Caselas, Beariz, Cee... y así hasta una absorción total de 977.814 toneladas de CO2 en Galicia, la comunidad que, de lejos, más proyectos de compensación tiene. Prácticamente el 80% del total, repartidos en 2.023 hectáreas equivalentes a 2.833 campos de fútbol. Los de la provincia de Pontevedra engloban unas 420.000 toneladas de CO2; cerca de 327.000 los proyectos de Ourense; 183.500 se ubican en Lugo; y 47.000 en A Coruña. Entre lo que está contratado y la llamada “ bolsa de garantías” –un porcentaje se reserva a la posible “desaparición” de absorciones en un proyecto por causas de fuerza mayor”–, quedaban disponibles 175.365 toneladas de CO2 en la comunidad a cierre de 2021.
