Hay dos caras en la evolución del mercado laboral en Galicia en agosto. Diferentes, mucho, y compatibles. La comunidad superó de media los 1,039 millones de afiliaciones a la Seguridad Social, una cifra sin precedentes, y el habitual ajuste de los últimos días se llevó por delante 11.800 empleos.
Todavía no hay detalles de cuáles fueron los sectores protagonistas del récord de altas a lo largo del mes y del recorte después por el fin de la temporada alta de la campaña estival, aunque no hace falta mucha intuición para saber que la hostelería está entre ellos. El último verano antes de la pandemia dejó una ocupación récord en la restauración y los establecimientos de hospedaje en la comunidad con casi 90.000 trabajadores.
Un año después, en agosto de 2020, ambas actividades rondaron los 77.000 efectivos, lastradas todavía por el golpe de la primera ola del coronavirus. ¿Y cómo fue este 2020? El último balance público recoge los datos hasta julio y anticipan una importante recuperación. El incremento anual de las afiliaciones se sitúa en el 2,7%, pero en comparación con 2019 el recorte roza el 9% (7.748 menos), sin olvidar que una parte de los ocupados siguen en algún tipo de ERTE. Aún así, a pesar de que la hostelería es históricamente el segundo sector con más trabajadores en Galicia y lo que ocurra con ella condiciona a todo el mercado laboral, los ingresos por cotizaciones sociales saltan los niveles prepandemia.
La Tesorería General de la Seguridad Social recaudó hasta junio en Galicia unos 1.919 millones de euros en las cuotas que abonan empleados y empleadores. Es un 5% más que en la primera mitad de 2020 (1.827 millones) y un 4% por encima de 2019 (1.844 millones de euros), según el último informe publicado por el organismo.
Los importes no incluyen ni los ingresos pendientes de aplicación ni los que vienen por la vía de las mutuas colaboradoras, pero son representativos de la tendencia general en las cotizaciones. Y Pontevedra se sitúa entre las provincias más aceleradas este año. La subida de recaudación en su caso llega al 7,5% frente a 2020 –los únicos territorios con mayor ascenso son Granada (10,6%) y Zamora (8,7%)– y al 5,1% sobre las cifras de 2019. Los ingresos por cotizaciones en A Coruña repuntan un 3,6%; un 3,2% en Lugo; y el 5,2% en Ourense.
La contribución del régimen general rebotó un 4,4% con más de 1.500 millones de euros. El de los autónomos se dispara un 9,2% (222,7 millones). Por recargos de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales se obtuvieron 12,6 millones, un 0,5% más que en 2020; y el cotizaciones de parados y bonificaciones de fomento del empleo los ingresos aumentaron un 6,6% (152 millones).
Canarias es la excepción en la recuperación de la caja de la Seguridad Social, que arrastra una caída en el último año del 4,4%. Castilla-La Mancha y Murcia sobresalen en los incrementos respecto a 2020, con subidas del 6,5% y el 6,4%, respectivamente; y en comparación con el saldo previo a la crisis del coronavirus, Murcia repite en los puestos altos (8,7%); seguida de Andalucía (6,4%) y Madrid y Valencia (5,8%).
La suma del conjunto del país sí incorpora los ingresos al completo, incluidos los de las mutuas, que suponen un 8,2% de los derechos reconocidos en las cuentas del sistema. Las cotizaciones sociales ascendieron a 63.726 millones de euros al cierre del primer semestre, lo que supone un incremento anual del 7,7%. “La evolución de los ingresos por cotizaciones de ocupados se encuentra aún afectada por las medidas de protección y apoyo a los trabajadores que el Gobierno puso en marcha el ejercicio pasado para hacer frente a la pandemia”, recuerda la Seguridad Social, en referencia, entre otras, a la exoneraciones concedidas a los trabajadores de empresas acogidas a un ERTE “y que, hasta el 30 de junio, han supuesto ingresar 1.031 millones menos”, además de las exoneraciones de las cuotas a autónomos perceptores de las prestaciones extraordinarias.
Las claves para entender cómo es posible que la recaudación crezca si la afiliación en Galicia arrastraba hasta junio una merma del 0,8% respecto al mismo mes de 2019 (8.739 empleos de diferencia) están en lo que pasa con los ingresos del IRPF, también al alza: menos altas laborales en la cifra global, pero con mejores bases de cotización. La Agencia Tributaria ingresó por retenciones de trabajo de las grandes empresas un 3,9% más que en 2019 durante la primera mitad del año y el ascenso es de un 3,2% con la suma de las pymes. Las retenciones de las administraciones suben más incluso, un 8%, por las pensiones y los sueldos de los efectivos contratados por la pandemia.
Educación y sanidad, con mejores nóminas que la hostelería, lideran la creación de empleo en Galicia frente a los tiempos pre-COVID: alrededor de 3.500 puestos más cada uno. Programación y consultoría, de perfil técnico y mejores condiciones laborales, incorporaron a 1.400 trabajadores; unos 1.000 los servicios técnicos de arquitectura; 1.085 las actividades administrativas; y 1.300 la industria del motor.
