La logística es uno de esos excepcionales nichos laborales con un claro desequilibrio entre oferta y demanda en Galicia. Hay más puestos vacantes que personas dispuestas a ser operarios de almacenamiento y de transporte de mercancías, un indicador de la “muy buena perspectiva de empleo de estos profesionales en la actualidad”, según destaca el Instituto Galego das Cualificacións en un informe que acaba de publicar sobre las tendencias del mercado de trabajo autonómico y las necesidades de formación.
Aunque el análisis bebe de los datos de 2019, el organismo dependiente de la Consellería de Emprego e Igualdade cree que algunos de los oficios con mayor tirón saldrán “claramente potenciados” de la crisis sanitaria del coronavirus, “mientras que otros pueden experimentar un ligero retroceso a la espera de que el mercado de trabajo realice una serie de ajustes dentro de la denominada nueva normalidad”. La logística va en el grupo de los aventajados.
“El estímulo del comercio en línea por el efecto del COVID-19 y el auge de las entregas de comidas a domicilio –señala el estudio– pueden favorecer que estos perfiles profesionales sigan obteniendo buenos resultados a pesar de la crisis sanitaria”. Y sí, por esas dos razones, pero también por el nuevo modelo de gestión de los stocks, el sector esquiva en la comunidad el golpe de la pandemia, convertido en líder de la contratación.
“Como ha pasado en otras áreas, esta situación ha hecho que la evolución prevista en cinco años se haya acelerado en solo uno”, explica Iago Domínguez, gerente del Clúster da Función Loxística de Galicia. “El sector ha sufrido mucho para adaptarse –añade–, pero ha podido más la responsabilidad del abastecimiento que la cuenta de resultados”.
Muy poco antes del estallido de la crisis del COVID-19, la actividad batió en Galicia su récord de ocupación. En el otoño de 2019, coincidiendo con el Black Friday y la antesala del bum del consumo navideño, rozó los 52.000 afiliados a la Seguridad Social. Un año más tarde, ya en plena pandemia, no había demasiada diferencia: 51.600.
El almacenamiento y las actividades anexas al transporte superaron los 11.100 contratos entre enero y febrero del actual 2020, uno de cada diez de todos los firmados, superando por primera vez a la hostelería. Su actividad creció un 12%, según el IGE, en medio de los “números rojos” de la mayoría del sector servicios.
“Los clientes tratan de reducir al maximo el almacenamiento”
“El ecommerce acumula un incremento anual del 27% y las empresas a nivel global tratan de reducir al máximo el servicio de almacenamiento, del que ahora se encarga el servicio logístico”, indica Juan Martínez, socio fundador del Grupo Kaleido Ideas & Logistics.
El nuevo just in time deja de lado “el almacenamiento de las existencias dos meses antes de consumir y el pago adelantado” para una gestión “al día” en manos del proveedor. “De ahí la inversión en alquiler de naves, como ocurre con Amazon, que evitan una descapitalización de liquidez de las empresas”, detalla Martínez.
“La buena organización del transporte genera eficiencia”
“Hasta en los puestos menos cualificados se requiere una especialización que no hay ahora en la oferta formativa”
“La logística empieza a tener un cariz de especialización, nada que ver con lo que hasta ahora todo el mundo pensaba: el transporte, el camión y poco más”, relata el gerente del Clúster de la Función Loxística. Las tensiones en la cadena durante el confinamiento “nos han hecho aún más conscientes de su utilidad”. “La buena organización del transporte y el almacenamiento genera eficiencia –continúa Iago Domínguez–. Por eso existe esa gran demanda de operarios y de personal especializado, que forma parte ya de los comités de dirección”. Dos de los grupos de trabajo del sector en Galicia se centran en la industria 4.0 y la digitalización. “Hasta en los puestos menos cualificados se requiere una especialización que no hay ahora en la oferta formativa”, avisa.
