El clima en Lalín en el siglo XXII: solo cuatro días bajo cero y tres meses de precipitaciones

La imagen que acompaña esta información se tomó en el casco urbano de A Estrada, en el conocido como ‘veranillo de San Miguel’ el pasado mes de octubre. No hace falta que viajemos tan atrás en el tiempo para darnos cuenta de hasta qué punto el cambio climático ya ha convertido las estaciones en un vaivén de frío y calor: en febrero, las temperaturas primaverales acompañaron la Feira do Cocido y también la última mitad del mes, hasta el punto de adelantar la floración de frutales y del brezo.

De eso trata el cambio climático: fenómenos meteorológicos extremos como desbordamientos de ríos por jornadas continuas de trombas de agua, temperaturas demasiado elevadas en meses fuera de la primavera y el verano o tormentas en casi cualquier época del año. Desde el Ministerio para la Transición Ecológica está en marcha una Plataforma sobre Adaptación al Cambio Climático en España. Su web dispone de un visor de escenarios de cambio climático en el que consultar, por años, cómo va a variar el termómetro o cómo se comportarán las precipitaciones, hasta el año 2100.

Rodeiro, el más frío

En Lalín, el año pasado la temperatura máxima fue de 27,3 ºC y las olas de calor duraron hasta 9,5 días, según esta plataforma. Pues bien, en 2030 va a llegar a los 32,3 . En 2074, dentro de 50 años, este termómetro va a suavizarse, pero muy poco, pues en verano podrían alcanzarse los 31,9 grados. Y en 2100 llegará cómodamente a los 32,7 de máxima. Mencionábamos antes la duración de las olas de calor en la cabecera comarcal dezana: resulta que en sus datos históricos, ya hubo un episodio que duró 9 días en 2001, y seguirán en este tramo tanto dentro de 50 años como a la entrada del nuevo siglo.

Y de las temperaturas extremas a los valores bajo cero, de los que estamos muy cerca en la borrasca de este fin de semana. El año pasado en Lalín hubo 7 días con mínimas en negativo; la previsión es que en 2030 sean 8 jornadas y en 2074 suban hasta las 8,5. Pero el calentamiento global, que nos lleva a estaciones cada vez más cálidas, facilitará que en el año 2100 solo haya cuatro días por debajo de los cero grados. Pero atención, porque Lalín no es el más frío, sino Rodeiro: aquí hubo temperaturas bajo cero hasta en 44 jornadas. y en 2099 serán solo 9.

En cuanto a las precipitaciones, durante el año pasado hubo en Lalín 150 días con lluvias de al menos un milímetro. Y va a ser en esta categoría donde se noten los efectos del cambio climático: dentro de seis años, en 2030, la cifra va a bajar a 148 jornadas, y lo seguirá haciendo hasta las 99 dentro de medio siglo para, ya en 2100, tener lluvia solo 96,5 días, es decir, poco más de tres meses al año.

Vila de Cruces

Lloverá menos en Lalín, pero no en Vila de Cruces. En este municipio, donde está operativa la estación meteorológica de Camanzo, durante 2023 se certificaron 256 días con al menos un milímetro de precipitaciones. Son el equivalente a 8 meses y medio. Al contrario que en Lalín, la cifra irá creciendo en los próximos ejercicios, llegando a 257 en 2030, a 269 en 2074 y a los 280 días en el año 2100. Las lluvias suelen venir acompañadas de un aumento de las temperaturas, por eso subirán las máximas y las mínimas. Si en 2023 en Cruces el mercurio llegó a los 26,6 grados, en 2030 ya se colocará en los 31,8 y en 2100 bajará, pero apenas, para marcar un tope de 31,01 ºC. Y si la media de la temperatura mínima en 2023 fue de 3,06 grados, dentro de medio siglo será de 5,7, y de 5,8 al entrar en la nueva centuria.

Cruces, como Lalín, tendrá a medio plazo menos jornadas con el termómetro en valores negativos: si el ejercicio pasado hubo 9,5 días bajo cero, en 2030 serán uno menos, en 2074 sigue bajando a 8 y en 2100 ya serán solo 2,5.

Mínimas de 20 grados

Decíamos que el cambio climático traerá consigo una subida de las temperaturas mínimas. Y esto se va a notar en A Estrada, el único de los municipios de la zona donde habrá jornadas que ya amanezcan con 20 grados de mínima. Ya ocurrió una vez el año pasado, y en 2030 se calcula que se repetirá durante seis días a lo largo del año. En 2100 la cifra habrá subido ya a 9. ¿Y cuál será la temperatura máxima extrema? Puede llegar a los 39,7 ºC en el año 2029 en el municipio estradense, y en ese mismo ejercicio se quedará en los 38,4 en Lalín.

Forcarei multiplica por diez sus precipitaciones en un mes de febrero

Febrero deja tras de sí dos borrascas, Karlotta y Louis. Gracias a ellas, en Forcarei se recogieron durante el mes que acaba de terminar 332,3 litros por metro cuadrado (l/m2), que son diez veces más que los 30,9 de febrero de 2023. Es cierto que ese mes del año pasado fue muy seco, con solo 19 milímetros de precipitaciones en Lalín (que este 2024 cosechó 176,4) y 23 en Camanzo (198,2). En Forcarei hubo 9 días que superaron los 10 l/m2 por jornada, y el más lluvioso fue el 8 de febrero, en plena borrasca Karlotta, con 49,3 milímetros de precipitaciones. Ese día cayeron en Camanzo 35,5 milímetros, mientras que en Lalín fueron 36,2. Fue también en Forcarei donde se sintieron con más fuerza las rachas de viento, pues alcanzó los 103,1 kilómetros por hora (km/h), por delante de los 82 de Camanzo y los 81,8 de la estación urbana de Lalín.

En un mes en el que los temporales se combinaron con días más propios de la primavera, las temperaturas máximas llegaron a los 23,7 grados en la estación cruceña de Camanzo, mientras que las mínimas, también en este enclave, se quedaron en los 2,7. Es la mayor oscilación en la zona, puesto que en Lalín el termómetro alcanzó en febrero el tope de 20,9 ºC, y de mínima marcó 2,3. Por su parte, en Forcarei la jornada más fría tuvo una mínima de 1,9 grados, mientras que la máxima llegó a los 20,3. En febrero del año pasado las máximas se habían movido en torno a esos 20 grados, pero las mínimas llegaron a los -2,5 en Forcarei, los -2,1 en Lalín y los -1.8 en Camanzo.

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