¿Viento a favor para los intereses de Rapa das Bestas?

El TSXG aprueba medidas cautelares que paralizan las obras, ya iniciadas, en Monte Acibal, donde también hay caballos salvajes y rapa

Ganado en la zona de obras en el Monte Acibal fotografiadas por la plataforma Amil Sen Eólicos.

Ganado en la zona de obras en el Monte Acibal fotografiadas por la plataforma Amil Sen Eólicos. / Ana Cela

Ana Cela

Ana Cela

Parece que el viento ha virado y sopla favorable para los intereses de la Asociación Rapa das Bestas de Sabucedo. El colectivo se parapeta en la prudencia a la espera de que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) resuelva sobre su petición de medidas cautelares que impidan el inicio de las obras en el parque eólico Campo das Rosas, una de las instalaciones para las que se presume una mayor afectación a la zona que desde hace siglos habitan los caballos de la cabaña de O Santo, la misma que perpetúa la ancestral Fiesta de Interés Turístico Internacional que promueve este colectivo de A Estrada. La asociación, que acudió al TSXG de la mano de la Asociación para Defensa Ecolóxica de Galiza (Adega), Alarma na Terra de Montes y la Comunidade de Montes de Quireza, ha acogido como una buena noticia la reciente resolución del TSXG de suspender de forma cautelar la ejecución del parque eólico Acibal –sus obras ya habían comenzado–, situado entre los términos municipales de Moraña, Barro y Campo Lameiro, un entorno en el que también existen caballos salvajes que habitan el monte y con los que también se celebra una rapa tradicional.

En este caso, la sala concluye que las actuaciones previstas en el proyecto del parque “afectan a los hábitats de interés comunitario y de especies catalogadas situados en el humedal das Brañas de Amil, así como a los petroglifos ahí situados, al igual que en el monte Acibal y en el Curro de Amil, afectación cuya mayor o menor intensidad y grado de protección, corrección o compensación se determinarán (en su caso) en el recurso principal”. Aprecia el alto tribunal gallego el denominado periculum in mora, el peligro por la demora procesal, que forma parte de la esencia de la medida cautelar.

La sección tercera de la Sala de lo Contencioso-administrativo del TSXG destaca que ya advirtió en diciembre de 2022 en un auto, en el que citaba una sentencia del Tribunal Supremo, “que los principios de cautela, prevención y precaución son propios del Derecho de la Unión Europea, de modo que, ante la mera posibilidad de que se produzca un daño irreparable o de muy difícil o incierta reparación –aún adoptando medidas correctoras sobre las zonas protegidas–, debe prevalecer la suspensión de la ejecución de la actividad que puede producir ese riesgo, al ser prevalente el interés general en mantener indemnes esos espacios públicos sobre el particular que tiene la promotora del parque eólico Acibal en ejecutar de forma inmediata el proyecto autorizado, por muy legítimo que sea su derecho”.

Este interés prevalente, así como la existencia de posibles daños irreparables y la apariencia de buen derecho de la pretensión anulatoria fueron igualmente tenidos en cuenta para que la Sala suspendiera la ejecución de otros parques eólicos. No obstante, advierte que ello “no significa, en modo alguno, que se aplique la suspensión de forma automática”, como prueba que se haya denegado en otros casos.

Consciente de todo ello, la asociación Rapa das Bestas interpreta esperanzada la resolución del TSXG por la existencia de ciertos paralelismos entre esta situación y sus propias pretensiones de defensa del hábitat ligado a esta secular tradición y al modo de vida de sus caballos. No obstante, también mantiene sus reservas por lo que pueda pasar.

Esperanza y malestar

Por el contrario, el colectivo estradense trasladó ayer su profundo malestar después de que hayan surgido voces, “supuestamente autorizadas” en defensa de los proyectos eólicos, que cuestionan las intenciones de quienes se manifiestan en contra de la forma y los fundamentos de aplicación de este modelo de aprovechamiento de la energía del viento.

Evidentemente, a la vista de cómo ha escalado en los últimos meses el conflicto eólico, ha llegado un momento en el que es difícil la existencia de discursos verdaderamente imparciales en este asunto. Sin embargo, Rapa das Bestas observó ayer que se está generando en los últimos días un clima tendente a abonar, con determinadas opiniones, un contexto que pueda pretender influir en las decisiones judiciales que, por otro lado –señalan– no solo son cuestionadas, sino también menospreciadas, por esas mismas corrientes de opinión.

Desde la directiva de Rapa das Bestas se reconoce su “indignación” ante el hecho de que se esté usando un lenguaje que entiende completamente fuera de lugar, tanto en relación a profesionales de la Justicia como en referencia a colectivos que, como es el caso del de Sabucedo, defienden el espacio en el que viven los vecinos de esta parroquia de A Estrada y sus caballos. Indican que por asimilación, se sienten insultados cuando, por este tipo de defensa se les ha tildado de “ecofascistas”. Remarcan, además, que se ha tergiversado su lema de “energía eólica sí, pero no así”, al cambiarla por una equivalencia de la expresión “pero no aquí”. Inciden en que esta asociación está a favor de una “ordenación eólica racional y respetuosa con el medio ambiente”.

Llegados a este punto, desde Rapa das Bestas se cuestiona también el beneficio de estas explotaciones de la energía eólica para la zona en la que se asientan los parques. “Las eólicas tienen su sede en Madrid y esto no redunda en Galicia, va a la red eléctrica española; no son beneficios para los gallegos”, afirman. “En Madrid hay cero parques eólicos y en A Estrada más de una docena. Cuatro en la zona de la Rapa das Bestas”, remarcan.