La Xunta avanza en los trámites de otros dos parques eólicos con nueve molinos

Monte do Pé está entre Cerdedo-Cotobade y Ponte Caldelas y Touriñán III-2 se asienta entre A Estrada, Cuntis y Campo Lameiro

Proyecto de parque eólico en Monte do Pé entre Cerdedo-Cotobade y Ponte Caldelas.  | // FDV

Proyecto de parque eólico en Monte do Pé entre Cerdedo-Cotobade y Ponte Caldelas. | // FDV / Carlos García / Salomé Soutelo

Carlos García / Salomé Soutelo

El “acelerón eólico” que se está viviendo en Galicia tras establecer el Ministerio de Transición Ecológica plazos concretos en los que desarrollar estos proyectos se está dejando notar. El Diario Oficial de Galicia de ayer avanzaba los trámites para dos nuevos parques que afectan a Tabeirós-Montes y que suman nueve aerogeneradores.

Monte do Pé, situado en los concellos de Cerdedo-Cotobade y Ponte Caldelas, abre el plazo de información pública del estudio de impacto ambiental y las solicitudes de autorización administrativa previa y de construcción del proyecto. Promovido por Green Capital Power, Monte do Pé consta de cuatro molinos de 127 metros de altura y se sitúa próximo a los núcleos de A Coviña, Calvelle, A Pena y A Coutada, en los citados municipios. Supondría una inversión de 17 millones de euros y permitiría generar electricidad para abastecer a 17.251 familias al año.

El segundo anuncio da cuenta de la evaluación favorable de la declaración de impacto ambiental de Touriñán III-2. Contaría con cinco aerogeneradores: dos en A Estrada y tres en Campo Lameiro, aunque también afecta a Cuntis. La Dirección Xeral de Calidade Ambiental indica que el proyecto “es ambientalmente viable” siempre que se cumplan diversas condiciones recogidas en el estudio, por lo que da luz verde a la iniciativa de Greenalia Wind Power. El presupuesto de es de 22 millones de euros y la potencia, de 24 megawatios.

El impacto de Cunca sobre la Fervenza do Toxa

Ya en tierras dezanas, el parque eólico Cunca, que promueve Gren Capital Power en Vila de Cruces, tendrá una notable afección paisajística. Su Declaración de Impacto Ambiental, que está expuesta al público, recoge el impacto visual de sus 5 molinillos en varias aldeas (Orza y Abealla, por ejemplo) así como en el Coto da Madanela, el Miradoiro da Valiña y la Fervenza do Toxa, ya en tierras de Silleda y uno de los reclamos turísticos de la comarca dezana. La catarata queda a solo 1,7 kilómetros al sur de los aerogeneradores. Mientras el Instituto de Estudos do Territorio alerta de este impacto visual, el Concello de Vila de Cruces incide en que el proyecto obvia analizar el impacto en el éxodo y la despoblación del rural. El ruido de las aspas no atraerá turismo rural, uno de los pilares de Vila de Cruces, y tanto la Dirección Xeral de Patrimonio Natural como la Sociedade Galega de Historia Natural recomiendan medidas para frenar las colisiones de aves: pintar una de las aspas de negro y colocar balizar con luz intermitente para que puedan verlas, o usar sonidos de alerta cuando las rapaces o los murciélagos entren en zona de riesgo.