Con la crisis sanitaria todavía presente y con los efectos de escenarios negativos para la economía como el conflicto bélico en Ucrania o la huelga del transporte las comarcas han sido capaces de capear el temporal y cierran marzo con unas cifras muy positivas para el empleo. No solo porque se corta una tendencia negativa iniciada con el año nuevo –63 parados más en enero y 34 en febrero– sino porque el balance es positivo en los nueve ayuntamientos de Deza y Tabeirós-Montes y en los principales sectores productivos. Marzo se despidió con 110 personas menos sin trabajo que las que había en febrero.
En términos absolutos sobresale A Estrada como el concello, en comparación con Lalín, que ha sido capaz hace tiempo de dejar atrás la barrera del millar de parados. Esta coyuntura podría deberse a las importantes infraestructuras y equipamientos que se están poniendo en marcha en la capital de Tabeirós. En la cabecera comarcal vecina el ritmo es más bajo, pero cuando hablamos de cifras tan ajustadas es posible que en un mes la contención del desempleo se invierta y sea el otro municipio el que mejore sus datos. Si echamos un vistazo a otros territorios hay que reseñar las buenas perspectivas de inserción que muestra, en Deza, Silleda, pero incluso mejores son las de Agolada teniendo en cuenta que restan idéntico número de parados pero la localidad trasdezana está mucho más poblada. También por encima de los dos dígitos están las dos localidades de Montes: Forcarei y Cerdedo.
El balance es mejor que hace cuatro semanas, pero también respecto a hace un año y a marzo de 2022, fecha en la que la crisis sanitaria provocada por el coronavirus llegó y no para quedarse durante unos meses como algunos preveían ante una pandemia sin precedentes que modificó los hábitos sociales de todos. Hace dos años había en las comarcas 662 demandantes de empleo más que ahora; es decir, prácticamente había un 20% más de paro que en la actualidad. En estos 24 meses Lalín fue capaz de recortar en 143 su censo de desocupados y en Silleda había entonces 60 más. En Vila de Cruces son 47 menos, 22 en el caso de Rodeiro y 31 en Agolada. En Dozón, el municipio más pequeño de las dos comarcas el dato es muy llamativo tanto en cuanto partía de una treintena de desempleados y ahora son casi la mitad menos al concluir el primer trimestre del presente curso con 16.
A Estrada es el ayuntamiento que, en términos absolutos, más demandantes recorta, con exactamente 217 personas. En Forcarei ahora son 40 menos y 11 en el caso de Cerdedo que, como es habitual todavía por parte de la Consellería de Emprego, sigue desglosando los datos de este núcleo de manera independiente de los de Cotobade.
Más afiliación en el contexto autonómico
La directora xeral de Formación, Zeltia Lado, valoró de manera positiva los datos de paro inscrito contabilizados en marzo. Galicia con un descenso de 1.173 personas es la tercera comunidad autónoma en la que más cayó el paro con respecto a febrero; y la cuarta en términos relativos con un -0,76% menos de paro. En líneas generales, Lado indicó que en Galicia bajó el paro y aumentaron las afiliaciones y la contratación tanto en la evolución anual como mensual, pese al actual contexto socioeconómico de “incertidumbre” y “inseguridad” generado por la guerra de Ucrania, la subida energética y la huelga de transportes y “agravado por la falta de planificación y inconcreción de las medidas del Estado”, añadió. Con respeto al inicio de la pandemia (febrero de 2020), Galicia (-7,76%) continúa con una bajada del paro mayor que la inscrita en el Estado (-4,23%) con 3,23 puntos de ventaja. Hizo hincapié en que el desempleo cae en las principales variables: en las cuatro provincias y en las siete grandes ciudades, así como en todo los sectores de actividad económica, liderando el descenso a construcción (-18,88%), seguido de la industria (-17,60%), de los servicios (-14,95%) y de la agricultura y la pesca (-13,22%).
