El Consello da Xunta autorizó ayer la colaboración técnico-financiera de la Consellería de Infraestruturas y el Concello de Lalín para ejecutar un tanque de tormentas en la zona del río Pontiñas y mejorar los colectores interceptores. Las actuaciones tienen como finalidad aumentar los volúmenes de regulación y la capacidad de gestión de las aguas residuales en tiempo de lluvia. Según esta colaboración técnico-financiera con el ayuntamiento, Augas de Galicia llevará a cabo a contratación y ejecución de las obras, así como su dirección y gestión hasta completar su finalización. Y el Concello la puesta a la disposición y gestión de los terrenos necesarios, el deber de conseguir las autorizaciones para la ejecución de los trabajos, recibir las obras, así como su mantenimiento y conservación, empleando las instalaciones ejecutadas de acuerdo con la finalidad prevista. Se prevé iniciar la finales de este mes de marzo el proceso de licitación de las obras, con el objetivo de comenzar los trabajos a principios del próximo año. La actuación cuenta con un plazo de ejecución de 12 meses. Las obras estarán cofinanciadas por la Unión Europea en el marco del programa operativo FEDER Galicia 2014/2020.

Actualmente, el sistema de saneamiento del municipio está compuesto por una extensa red de colectores, unos 120 km, de carácter principalmente unitario. Las aguas residuales de la zona céntrica de Lalín son recogidas por el colectores interceptores que discurren por ambas márgenes del río Pontiñas. El sistema cuenta con 11 estaciones de bombeo principales y finaliza en la estación depuradora de aguas residuales de A Corredoira, encajada en la margen derecha del cauce fluvial del Pontiñas. Con los datos y las conclusiones recopiladas durante la redacción del Plan director de saneamiento Local, se determinó la necesidad de aumentar la capacidad de los colectores de las márgenes del río Pontiñas y la inserción en la red de un tanque de tormentas que permite la regulación del sistema durante los episodios de lluvia. La actuación en la red de colectores interceptores consiste en la ejecución de 4 tramos principales, con diámetros desde 400 mm a 2.000 mm, y pequeños tramos de entronque para la conexión con la red existente. También se diseña un alivio desde el tanque de tormentas y una conducción de vaciamiento del tanque. En cuanto a la construcción del tanque de tormentas a estructura estará semienterrada y diseñada para un volumen de retención de 5000 metros cúbicos. El tanque se vaciará por gravedad para lo cual se instalará una válvula vórtex, en cámara semiseca, que limitará el caudal máximo permitido por la futura ampliación de la estación depuradora de aguas residuales para esta cuenca del río Pontiñas.

Asimismo, se construirá un edificio auxiliar, en el que se instalará un mecanismo de pretratamiento inicial con pozo de gruesos y rejas de duele, que recibirá todo el caudal de llegada. El aliviadero dispondrá de un tamiz con paso de sólidos de 6 milímetros, de este modo el caudal aliviado desde el tanque recibirá un pretratamiento antes de su vertido.

Parque infantil del Cocido sobre la estructura

La actuación prevé, además, que el propio tanque de tormentas esté integrado en términos paisajísticos con la disposición de un parque infantil y la plantación de árboles y arbustos en el entorno. Para humanizar la superficie de hormigón generada por la construcción del tanque de tormentas, se prevé la disposición de un parque infantil, con elementos de juego que recuerden el cocido, plato y emblema cultural representativo del municipio. Se proyecta la ejecución de una zona de juegos para los más pequeños, con una tirolina a continuación de la que se dispondrá un túnel de red con forma de chorizo, además de una jaula de red con forma de cerdo que evoca su Feira do Cocido. Este elemento está diseñado para poder practicar diferentes actividades en su interior: juegos de pelota, laberinto de cuerdas, paredes trepadoras, barra de bomberos, redes, tobogán, etc. A estructura también presenta aberturas en diferentes puntos y la distintas alturas de su verja que facilitan la entrada y salida de los niños a la estructura del juego. La zona excavada, que luego se rellena para la ejecución del tanque de tormentas, se repondrá con la extensión de una capa de tierra vegetal de 30 centímetros de espesor y siembra manual. También se plantarán especies arbóreas autóctonas en el entorno del tanque. Además se habilitará un viario de acceso al edificio auxiliar del tanque de tormentas, formado por una capa de zahorra artificial, a lo que se accederá a través de las sendas del parque del río Pontiñas, de uso exclusivo de los vehículos de mantenimiento del parque y del tanque de tormentas.