La crisis de los suministros sería la culpable del retraso de las obras de la calle Progreso de Silleda, a tenor de las justificaciones dadas por la adjudicataria (Narom SL) al alcalde, Manuel Cuiña. La actuación, ya prorrogada en diciembre, tenía que haber concluido el 15 de enero. No lo hizo y tampoco se sabe cuándo rematará. Pero Cuiña sí ha constatado que en la última semana la empresa ha acelerado los trabajos, incluso con la subcontratación de dos firmas locales.
Sin ir más lejos, el mismo alcalde contó ayer “28 personas trabajando” en la calle, incluido el personal de la constructora Elías Taboada y de Silleda Jardín. Esta última se encarga de la plantación de los árboles de hoja perenne en el tramo más avanzado de las obras. Por ahora se han colocado magnolios reales, pero habrá otras especies.
El plazo de ejecución de la contrata finalizaba, inicialmente, el 30 de noviembre, pero ya entonces la adjudicataria reclamó una ampliación con motivo de un modificado que se incluyó en el proyecto por importe de 82.939,03 euros, que deja el precio final de adjudicación en 718.120,62. La prróroga otorgada fue de mes y medio, de modo que la fecha de finalización era el 15 de enero, aunque la empresa “creía que era hasta el 15 de febrero”, según le refirió a Cuiña. Narom SL achaca la demora a la escasez y el encarecimiento de distintos materiales que afecta a todo el mundo. Alude, en concreto, a que no le acaban de suministrar toda la piedra necesaria ni las farolas, que ya tendría “pedidas y pagadas”.
Ante la crisis de los suministros, que condiciona las obras públicas, la Xunta sacó un decreto de revisión de precios, pero no contempla a los concellos. Así que Cuiña y su homólogo lalinense, José Crespo, ya pidieron a la conselleira de Infraestruturas, con motivo de una reunión por la rebaja de la AP-53, que se amplíe el decreto autonómico para dar cabida a los concellos. Entretanto, Cuiña confirma la apertura de un expediente sancionador a Narom, con cuantías diarias de entre 300 y 3.000 euros, según se demuestre que el retraso ha sido más o menos atribuible a la empresa.
