Comenzaron con meses de retraso sobre lo previsto pero las importantes obras de reforma del colegio de Figueiroa marchan a buen ritmo. Desde la dirección del centro escolar reconocen que no saben el plazo que tiene la empresa, más allá del fijado inicialmente de cinco o seis meses, pero destacan los grandes avances realizados en muchas de las tareas. Mientras las obras avanzan, el centro y la ANPA siguen adelante con su intento de encajar esta reforma integral del centro con una ampliación de un comedor que cada año se queda pequeño ante la demanda de usuarios.
Hasta ahora, esta ampliación no se pudo realizar debido a que el espacio hacia el que podría expandirse se encontraba la caldera del edificio. Las obras iniciadas hace unos meses, con las que se busca una mejora de la eficiencia energética del edificio, han incluido la instalación de una nueva caldera en un nuevo emplazamiento y la retirada de la vieja, lo que abre la posibilidad a ampliación del comedor.
En ese punto, el centro creó un proyecto que presentó a la empresa adjudicataria. Este está siendo analizado por sus técnicos para intentar dar una valoración de lo que supondría incluir estos trabajos de ampliación sobre el presupuesto general. Una vez conocido el coste y la viabilidad del proyecto, llegará el momento de buscar financiación para llevarlo a cabo. El director del centro, José Manuel Reboredo, reconoció que tanto la ANPA como el centro están dispuestos a poner de su parte para poder aprovechar la ocasión y llevarlo a cabo en este momento tan idóneo. Necesitarán sin embargo el respaldo de otras administraciones, como el Concello y la Xunta para que se pueda hacer realidad.
En cuanto a los trabajos de reforma que se están llevando a cabo en todo el centro, Reboredo explicó que marchan a buen ritmo en su mayor parte, compaginándose bien con el día a día del colegio. Destacan en estos momentos los trabajos que se están llevando a cabo en su fachada. Las actuaciones de mejora de la eficiencia energética contemplan el aislamiento del edificio, con la colocación de lana de roca en el forjado, y el aislamiento exterior de las fachadas. El director señaló que todavía queda sin embargo una de las partes más complicadas, la que afecta a toda la fontanería.
Desde el centro aguardan que las obras de mejora puedan estar finalizadas en torno a las vacaciones de Semana Santa.
