El gobierno silledense rebate las críticas vertidas en tromba por la oposición contra el nuevo párking público gratuito. Desmiente que la cesión sea solo por dos años; subraya que el firme es de zahorra en todos los aparcamientos habilitados en solares particulares, en los que también se forman charcos cuando llueve; y aduce que sí hay dos plazas reservadas para personas con movilidad reducida en la calle Condes do Deza y que “se pondrán más”, si es necesario para cumplir la normativa.

En todos los aparcamientos cedidos por particulares, así como en parcelas destinadas a otros usos, se hicieron también obras de acondicionamiento. Así sucedió en los estacionamientos de las calles Cartagena, en 2012, y María Colmeiro, en 2014, en donde aún ha tenido que reponerse el cierre recientemente. También en 2014 se acondicionó el solar entre María Colmeiro y la rúa L, en convenio con la firma Edifar, que se ajardinó y se dotó de cierre vegetal y de madera después de rellenar un enorme socavón. Otra actuación de ajardinamiento se llevó a cabo entre la Rúa da Feira y la Xeral en A Bandeira en 2015. Y el espacio cedido para la petanca fue preparado como cancha deportiva. El gobierno reitera su agradecimiento “a todos y cada uno por dejar sus terrenos para uso público”. Y señala que “se habló con más propietarios [del entorno de Progreso], algunos con solares grandes, y ninguno quiso cederlos”.

Plaza reservada para personas con movilidad reducida en Condes do Deza. Bernabé/Javier Lalín

Vistos los antecedentes, desde el ejecutivo de Manuel Cuiña no entienden las suspicacias levantadas con el párking comprendido entre las calles Progreso, Condes do Deza y Morón, en donde hubo que retirar uralita y derribar paredes, lo que requirió una valoración técnica, un proyecto de ejecución y un procedimiento de adjudicación, lo que dilató también su tramitación. La única diferencia con los anteriores es que hay una penalización para la propiedad (Fernández Sarmiento SA) en caso de querer recuperar el solar antes de dos años, tiempo calculado para amortizar la inversión pública –25.000 euros–, teniendo en cuenta el volumen de vehículos usuarios. “Es más perjudicial para la propiedad que los anteriores”, afirman, ya que tendría que indemnizar al Concello con la parte proporcional pendiente de amortización.

La vigencia del acuerdo es “indefinida, como en todos los que firmamos hasta ahora”, replican desde el ejecutivo. “Al igual que en el resto de los convenios, la propiedad tiene un plazo (un mes) para avisar de que quiere recuperar el terreno”, explican. Lógicamente, mientras no solicite la devolución del solar, el aparcamiento se podrá seguir utilizando por tiempo indefinido, más allá de los dos años, que se refieren únicamente al plazo de amortización de la inversión.