Además del movimiento de asuntos en los juzgados de las comarcas durante el segundo trimestre, el Consejo General también difundió el informe sobre la violencia de género correspondiente al mismo periodo, entre abril y junio. Los datos indican que hubo ocho denuncias en el partido judicial de A Estrada y otras tantas en el de Lalín. En el caso de la capital dezana, de esas 8 denuncias cinco eran de la propia víctima, acompañadas por atestados policiales (como en el caso de siete de A Estrada), y las tres restantes tienen un atestado policial con intervención directa, como en otra de A Estrada. De estos 16 delitos, 14 corresponden a lesiones y malos tratos recogidos en diversos artículos del Código Penal, mientras que los 2 restantes (ambos en Lalín) atentan contra la libertad.

Desde los juzgados de A Estrada se elevó un proceso, con preso, al Juzgado de lo Penal. Se hizo lo mismo desde las salas lalinenses, pero sin preso. Al mismo tiempo, las salas judiciales de A Estrada dictaron órdenes de protección y seguridad para las víctimas: una de alejamiento, otra de prohibición de comunicación y una tercera de petición de alimentos. No hubo ninguna orden emitida desde Lalín.

A lo largo del trimestre, quedaron 7 procesos sobreseidos de forma provisional en A Estrada y otros 8 en Lalín, bien por no quedar justificada la perpetración del delito, o bien por no haber autor conocido de los hechos. Estas causas pueden reabrirse si se dan nuevos indicios o pruebas. Sin embargo, queda cerrado, por sobresemiento libre, un caso en Lalín, por no haber indicios de delito.