Medio Ambiente tiene abierta una investigación contra tres cazadores furtivos, después de que fuesen sorprendidos, de noche, en una zona libre de los montes de Zobra. Uno de los investigados es de Vilatuxe. Cuando los agentes medioambientales les dieron el alto, escaparon abandonando una escopeta y un saco, con dos liebres dentro, al borde de la carretera. La numeración de la escopeta permitió identificar a su propietario. Uno de los furtivos es bastante conocido entre los servicios medioambientales por tener otras denuncias relacionadas también con la caza. La Guardia Civil, además, abrió su propio oficio por el abandono del arma.