Hace ya cinco años que, de la mano de la Asociación para el Crecemento y la Orientación en Familia (Acrofam) y el Concello, A Estrada ofrece a sus generaciones más jóvenes educación emocional que trabaja transversalmente desde el aula "contenidos cognitivos, sensibles y emocionales" relevantes para el crecimiento personal de los niños. El objetivo final es que sean "más felices". Para ello, se les educa y refuerza en valores como la igualdad, el respeto, el compañerismo, la solidaridad y la aceptación "como primer paso" para lograr "una sociedad para todos", "más justa". Se fomenta su autoestima, se les proporcionan estrategias de resolución de conflictos no violenta y también se les enseñan destrezas de comunicación interpersonal.

Este año, han decidido secundar la iniciativa cuatro centros de Infantil y Primaria (el CEIP Figueiroa, el Cabada Vázquez de Codeseda, el Plurilingüe Oca y N.S. Lourdes) y tres de Secundaria (los IES Número 1 y Manuel García Barros y el centro N.S. Lourdes). Todos tienen experiencia en el programa salvo Lourdes, que se incorpora este año por primera vez.

Este quinto año de educación emocional en las aulas estradenses fue presentado ayer en el Concello por el teniente de alcalde Juan Constenla, la presidenta de Acrofam, Kim Llobet; los docentes Carlos Vila (doctor en Psicología y terapia familiar), Rebeca Cabaleiro (docente que conjuga expresión de emociones y arte) y Santiago Martínez (experto en oratoria y debate); así como por la directora del CEIP Cabada Vázquez, Anxos Dono López; la coordinadora de Normalización Lingüística del CEIP Oca, Pilar Rodríguez Prada; la orientadora del IES Número 1, Susana Blanco Baluja; la directora de N.S.Lourdes, Dolores Otero Neira; la orientadora del IES Manuel García Barros, Pilar Méijome Blanco; el presidente de la ANPA Picariños de Figueiroa, Jose Garrido; y el director del CEIP Figueiroa, José Manuel Reboredo.

El programa de este año arrancó hace un mes en Figueiroa e IES Número 1. Ahora recalará en el Cabada Vázquez y, tras la Navidad, en Oca y el IES García Barros. Vila y Cabaleiro enseñan a los niños de Figueiroa desde Infantil de 5 años hasta cuarto a descubrir y despertar sus emociones a través del arte en tanto que Vila y Baia Fernández instruyen a quinto y sexto en autoaceptación. La ANPA -muy satisfecha con los resultados de años anteriores- aporta 1.000 euros para que la iniciativa llegue a todos los niveles. En el CEIP Cabada Vázquez Baia Fernández trabajará técnicas de relajación con Infantil y el primer ciclo de Primaria y Vila, educación afectivo-sexual con el segundo y el tercer ciclo.Ya en el CEIP de Oca, en Infantil, Fernández propiciará el conocimiento de la risa y, junto a Carlos Vila, impartirá autoaceptación para el resto del centro. En los IES Nümero 1 y García Barros primero de la ESO abordará el descubrimiento de las emociones a través del arte. Además, tercero del Número 1 -que cuenta con alumnos mediadores en la resolución de conflictos formados en los últimos años- abordará en tercero los valores de una sexualidad responsable -que evite embarazos indeseados y enfermedades venéreas, por ejemplo- y en cuarto, oratoria y debate con Santiago Martínez. En el IES García Barros cuarto abordará también la autoaceptación.

Y, para formar a los padres, ayer arrancó en el colegio de Figueiroa la escuela de familias. Se programarán sesiones abiertas a todos los progenitores en los distintos centros.