Fútbol Sala | Primera Femenina

Marín Futsal y Poio Pescamar volverán al trabajo con el derbi en sus miras

Ambos equipos, que se enfrentan el 7 de enero, retoman la actividad el próximo lunes

Dani Sousa protege un balón de Ceci Puga en un partido entre Marín y Poio Pescamar.

Dani Sousa protege un balón de Ceci Puga en un partido entre Marín y Poio Pescamar. / RAFA VÁZQUEZ

Antonio Santos

La primera jornada de 2023 en el campeonato de liga femenino de fútbol sala estará marcada por el derbi local entre Marín Futsal y Poio Pescamar, dos equipos en dinámicas muy diferentes pero repletos de individualidades que podrían decantar la balanza del encuentro en cualquier dirección.

Ambos conjuntos regresarán al trabajo diario el próximo 2 de enero, para inmediatamente preparar ese enfrentamiento casi fronterizo, que, paradójicamente, se disputará casi en terreno neutral, con la pista del Pavillón Príncipe Felipe como anfitriona debido a las obras de reforma en A Seca.

Allí llegará un Poio Pescamar desatado en el primer tramo del curso, en el que solo ha cedido la victoria en dos ocasiones frente al mismo rival, el Futsi Atlético Navalcarnero, que ganó a las conserveras en la segunda jornada de liga (3-0) y, mes y medio después, en la eliminatoria de Copa (5-1). Aparte del actual líder de la competición liguera, nadie ha sido capaz de desbancar al cuadro rojillo, que está cómodamente ubicado en la tercera posición de la clasificación con once puntos de ventaja sobre el cuarto, en un playoff por el título más cerrado que nunca en tres de sus cuatro lugares de privilegio.

Sin embargo, el Marín Futsal no corre la misma suerte, ya que desde el principio de la temporada la irregularidad a la hora de puntuar ha marcado su desempeño liguero. El cuadro que entrena Ramiro Díaz, que perdió a efectivos como la brasileña Sara Santos en el mes de noviembre, también tiene una asignatura pendiente en sus partidos fuera de casa, en los que solo ha podido hacerse con la victoria en dos de ellos, el último a inicios del mes de noviembre (1-2, ante el colista, el Joventut D’Elx).

La nota más positiva, sin embargo, ha llegado una vez más con la Copa de la Reina, para la que el cuadro con base en A Raña ya se ha clasificado –por segundo año consecutivo– entre las ocho mejores y disputará la fase final, tras dejar en la estacada al Nueces de Ronda Atlético Torcal (3-6).

Además del cruce liguero, Marín y Poio podrían verse de nuevo las caras en la final de la Copa Galicia prevista para el Día das Letras Galegas, si ambos equipos son capaces de superar el 22 de febrero su envite de semifinales: las marinenses jugarán contra el Viaxes Amarelle, mientras que las conserveras, vigentes campeonas del torneo autonómico, harán lo propio ante el Pescados Rubén Burela.

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Mientras que no se prevén alteraciones en la plantilla del Marín Futsal, en el Poio Pescamar han confirmado la baja de la joven canterana Andrea Alvite, que alternaba su participación en el filial con la primera plantilla, con la que tuvo minutos y marcó un gol en la exhibición ofensiva desplegada ante el Rayo Majadahonda, en un partido en el que las de Luis López-Tulla terminaron ganando por 12 a 0.

La jugadora pontevedresa, nacida en 2004, formará parte hasta final de temporada del Bembrive de Segunda División, que se encuentra inmerso en la pugna para clasificarse a la fase de ascenso a la división de honor del fútbol sala femenino español.

No obstante, desde el cuadro rojillo señalan que “salvo sorpresa”, el capítulo de entradas y salidas está cerrado para la entidad en esta temporada 2022-2023.

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