Luisito vuelve a Pasarón para salvar de nuevo al equipo en un momento crítico. Lo hace cargado de ilusión, “como si fuera mi primer año de entrenador”. El técnico, que tiene en el entrenamiento de hoy el primer contacto con la plantilla, fue presentado ayer en Pasarón acompañado de la presidenta, Lupe Murillo.
“Estoy muy contento porque estoy donde realmente quiero estar. Hace tres años y dos meses que me fui y vuelvo a venir con la mochila cargada de muchísima ilusión y orgullo. Es mi manera de ser, sé que es un reto difícil, complicado. Pero yo ya he dicho muchas veces que miedo solo le tengo a la muerte, y ni a la mía. El resto, hay que trabajar, tener ilusión y como eso lo tengo no me preocupa”, reconoció el técnico de Teo.
“El Pontevedra es uno de los equipos al que me cuesta mucho decirle que no"
El entrenador que llevará de nuevo al Pontevedra a Segunda B reconoció que “el Pontevedra es uno de los equipos al que me cuesta mucho decirle que no. Lupe sabía que era my difícil decirle que no al Pontevedra, yo ya lo dije siempre, para mí es como una hermana mayor. Hay equipos que están hecho para entrenadores y entrenadores que están hechos para equipos. Considero que el Pontevedra y Luisito lo son y quiero que siga como hasta ahora”, añadió.
El técnico ha firmado hasta final de temporada sin sus ayudantes Pepe Rico y Roberto Valdés, por motivos personales, pero entrenador y presidenta mostraron la complicidad de saber que si todo va bien, será más. “Luisito y yo nos solemos entender”, zanjó Murillo.
Un día para la acción
Luisito no miente cuando dice que el reto es complejo, principalmente porque quedan seis partidos y tan solo tiene un día para preparar el del Guijuelo de mañana. “Tengo un día y tengo que tratar de llegar a la mente del futbolista que ahora mismo es lo más importante. Tiene que darse cuenta de que defender este escudo no es defender cualquier escudo. Es un club y una institución enorme. Aquí hay que apartarse de la presión y en un campo tan grande hay que jugar, no hay más”, simplificó el granate.
Luisito reconoció que la situación del equipo es complicada: “La plantilla está claro que está bloqueada. De lo que hicieron hasta ahora no va a salir una palabra mía para mal. Ahora lo que tienen es que adaptarse lo más rápido posible a mí y yo a las características de ellos”.
“Me tengo que adaptar a los futbolistas. Tengo un día, no más tiempo y el miércoles al Guijuelo hay que ganarle como sea"
Sobre su idea de juego, dejó claro que dependerá de los futbolistas. “Me tengo que adaptar a los futbolistas. Lupe sabe que cuando vine tuve que adaptarme a los futbolistas que había en Tercera y ahora me tengo que adaptar a los futbolistas que están, no me queda otro remedio que tratar de sacarles el rendimiento ya. Tengo un día, no más tiempo y el miércoles al Guijuelo hay que ganarle como sea”.
De cualquier forma para el entrenador aún no está todo perdido, ni mucho menos. “Hay margen, pero hay muy poco tiempo. Margen hay porque los equipos están muy apelotonados salvo los dos que tienen un poco de ventaja. Pero con esta liga ganas tres partidos de seis y estás enganchado. ¿Quién le iba a decir a Unionistas que iba a perder con el Celta B? Pues perdió, y en eso es en lo que hay que creer. Creer, creer y no hay nada más. Luego trabajo y trabajo”.
El técnico dejó claro que el Pontevedra de ahora es un gran equipo, “Es un trasatlántico, lo que pasa es que hay diez. Al ser una liga tan corta y tan complicada ganas un partido y parece que subes para arriba y pierdes dos y estás en la miseria. Lo que tienes que mantener es el equilibrio. Saber que lo que hoy es blanco no puede ser negro. Hay que tratar de ver a los futbolistas que si sales con la presión de que tienes que ganar y ganar no eres capaz”.
Subrayó el técnico que “hay que tener tranquilidad. Es cierto que es una liga muy corta y quedan seis partidos, para nosotros son fundamentales y hay que jugar cada balón como si fuese el último si queremos estar enganchados”, zanjó.
