El reto que tenía el Teucro ayer sobre la pista del Municipal ante el Barça B era titánico y se le hizo cuesta arriba desde el primer minuto. Al equipo de Irene Vilaboa le costó entrar en el partido, tanto que la entrenadora se vio obligada a pedir el primer tiempo muerto en el minuto seis con el 1-4 sobre el luminoso. Surtió efecto y poco a poco el Teucro ganó presencia en la pista. Tanto fue así que para el minuto 10 el Teucro logró ponerse a tan solo tres goles del líder. Pero los culés eran infranqueables y pese a sufrir la expulsión de Bruno Reguart continuaron su escalada en el marcador mientras un Miguel Sío muy potente en ataque no dejaba de intentarlo.

Pasados los 20 minutos de la primera parte la ventaja del Barça ya era de nueve goles (9-18) tras sufrir la expulsión de Víctor Deco.

De ahí al descanso no hizo más que sufrir el ataque culé mientras Wermbter trataba de evitar una goleada aún mayor para irse al descanso con el 12-21. De vuelta a la pista la situación no hizo más que empeorar, las cosas no salían y con Víctor Deco expulsado y sin haber marcado aún en la segunda parte, Vilaboa pidió un tiempo muerto en el minuto 36. De algo sirvió porque solo entonces fueron capaces de marcar.

Estrenó el marcador Deco y el Teucro trataba de recortar las distancia de 17-28. No era tarea fácil, los de Vilaboa estaban algo desenchufados y volvieron a verse en inferioridad con la expulsión de Sío. Ricardo Antón tiró de do de pecho para darle a su equipo tres tantos seguidos, poro el líder de la categoría contestó con un parcial de cinco que dejaba a los teucristas ko.

Casi sobre la bocina Deco puso el último tanto que dejaría el partido con un doloroso 21-34 que le complica las cosas el Teucro en la clasificación.