Actualmente, el Pontevedra tiene cubiertas 15 de las 16 fichas sénior que tiene disponible cada equipo, por lo que la llegada de Álvaro Bustos y de Adighibe le obligarían a liberar una.

Esta puede ser una de las razones por las que el club todavía no ha hecho oficial estos dos últimos fichajes, pues todavía estaría negociando con el futbolista que saldrá del equipo, previsiblemente en calidad de cedido, para dejar su hueco a uno de los dos refuerzos.

Al igual que sucedió en el mercado de invierno, cuando la llegada del propio Álvaro Bustos y de Borja Domínguez precipitó la cesión de Adrián Mouriño al Rápido de Bouzas hasta final de temporada. Entonces, el centrocampista y la entidad granate llegaron a un acuerdo para su renovación por una campaña más. Sin embargo, el mediapunta de Porriño vuelve a ser uno de los candidatos para dejar el equipo y, teniendo en cuenta el convenio de colaboración que el Rápido de Bouzas ha firmado con el Pontevedra -bautizado como "Pacto de las ostras"-, su destino podría ser de nuevo el conjunto vigués, que está confeccionando una plantilla muy competitiva para intentar volver a Segunda B y en donde Mouriño encajó muy rápido.

También hay que tener en cuenta que alguno de los jugadores con contrato en vigor con el Pontevedra podría estar estudiando alguna oferta de otro club.