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fútbol

Germán Nóvoa, felicidad plena

"Las sensaciones de volver a entrenar con el equipo han sido maravillosas", remarca

Germán Nóvoa, ayer, en la casa familiar en la localidad de Morgade, en Xinzo. // Iñaki Osorio

Ya está el primer equipo ourensano en marcha, el Ourense CF ya anda metido en la carrera hacia el ascenso a Segunda división B. Mañana arrancará el otro, el Barco, que cerrará el cuarteto que completan Compostela y Arosa. En el horizonte, todavía muy lejano, el domingo 19 de julio, cuando los blanquinegros se enfrenten a los pontevedreses.

Germán Nóvoa es el primer capitán del conjunto de Oira, con el que cumple la tercera temporada. Hará 24 años en agosto. Lejos quedan por tanto los años mozos en el colegio, lo que no quiere decir que no los haya revivido ahora. "Las sensaciones de volver a entrenar con el equipo han sido maravillosas, me he sentido como un niño pequeño, eso de volver a tocar el balón en el campo de Oira después de tres meses...", relata Germán, que confiesa que se temió que la temporada ya no se reanudase. "Soy muy negativo, es verdad que pensé que este año no jugábamos más. Me dije, 'la Federación va a ascender al primer clasificado y ahí queda la cosa'. Con el paso de los días, cuando empezamos a tener noticias de este play off, me sentí bastante aliviado. Va a ser el primero para mí, un plus más. Y en Balaídos, otro, importante", remarca.

¿Se le ha hecho muy largo todo este tiempo? "Mucho, no veía la luz al final del túnel, andaba cabizbajo. Cada día se me hacía más largo, estaba muy triste", subraya el limiano, que pasó el confinamiento en la casa familiar de Morgade, en Xinzo, con sus padres y una pequeña 'cadeliña'. "Al menos teníamos un jardín al que salir a tomar el aire", recuerda ahora.

Poco a poco va amainando la tormenta, se confirma el play off exprés y el Ourense CF regresa a los entrenamientos. "Las sensaciones han sido maravillosas, me han dado ganas de abrazar a todos los compañeros. He sentido una felicidad increíble", recalca.

Que un vestuario unido gana puntos no es un tópico. Nóvoa lo pone en valor. "Somos una familia, todos somos amigos, después de cada entreno nos vamos a tomar un café juntos. Se echaba de menos, la verdad", expone.

La temporada estaba siendo espectacular, y lo será ascienda o no, pero ahora que está tan cerquita, a dos partidos, con una guinda quedaría mejor, ¿no? "Yo le pondría un sobresaliente, todo el año peleando de tú a tú con el Compostela, lo habríamos firmado a principio de temporada. Hay mucho trabajo detrás, nadie nos ha regalado nada. Pero sí, ahora buscamos ese pasito que la convierta en inolvidable, de un año para otro cambian muchas cosas, mira el Bergantiños, lo mal que lo estaba pasando. Nos sobra ilusión, muy poca gente ha peleado un ascenso en nuestra plantilla, leía el otro día que en el Arosa había un montón que ya habían pasado por ello...".

Una sola vez se han enfrentado este año Arosa y Ourense CF, empate sin goles en territorio rojiblanco... "Recuerdo que hicimos la mejor primera parte de la temporada, si nos vamos al descanso 0-2 ó 0-3 habría sido normal. Cosas del fútbol, acabamos pidiendo la hora", detalla Germán, sabedor que este mes y medio de entrenamientos y sólo entrenamientos "se va a hacer muy largo. Pero el premio bien lo merece, lo bonito se hace esperar".

"No, no tengo ningún miedo a que nos pueda pasar algo, aunque el respeto siempre va a estar ahí", finaliza el capitán blanquinegro.

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