Un visto y no visto la trayectoria de Txemi Urtasun en el Ourense Baloncesto, un partido en Valladolid y uno posterior en el Paco Paz contra el Cáceres. El liderazgo y la experiencia que reclamaba Gonzalo García contestó sobre la cancha con 34 puntos en 53 minutos de juego, anotación que no sirvió sin embargo para que los ourensanos escapasen de la dinámica de derrotas en la que se despidieron.
"Poco balance puedo hacer, si acaso que me encontré muy bien en el club, con buena sintonía con el entrenador y los compañeros y con buenas sensaciones. Fue una pena la derrota por un punto en Valladolid, estoy seguro que si hubiéramos ganado allí lo habríamos hecho también contra el Cáceres, el romper la mala dinámica nos habría dado alas", relata.
Urtasun llegó a Ourense a finales de febrero, se marchó antes de mediados de marzo. Dicen que lo bueno y breve, dos veces bueno, pero tan breve... "Han sido sólo dos partidos, pero el impacto ha sido grande. Nadie, nadie barruntaba que esto iba a pasar cuando acabó el partido contra el Cáceres, todos oíamos hablar de este virus, pero que tres o cuatro días después se parase la liga nadie podía predecirlo", subraya. Vamos, que si lo llega a saber ni viene, ¿o no? "Al contrario, habría ido antes, habría podido jugar algún partido más".
Y cuando dejaron Ourense, ¿pensaron que ya no se volvía a jugar? "Yo pensaba que sí, a puerta cerrada pero sí, que cuando bajase la famosa curva igual volvíamos, sin público pero volvíamos. Pasaron los días y la Federación tomó la decisión de dar por acabada la temporada y que se disputase un play off por el ascenso que me da que no se va a jugar", detalla.
Contra el Cáceres encadenó el COB la quinta derrota. Por buscar algo bueno no fueron necesarias ya más cuentas... "Claro, el objetivo entonces era salvar los muebles. Pero vino esto y acabó con todo".
¿Le ha dado tiempo a conocer algo de Ourense? "Poco, vivía en un hotel en el centro y esa zona es la que más conocí, el río también. No era la primera vez que venía, ya la visité algún domingo suelto".
Txemi Urtasun es natural de Pamplona pero no pasó el confinamiento en Navarra, lo hizo en Sevilla, con su mujer, Alba, y su hija Sofía. Qué cosas, el lunes echaron por enésima vez la película 'Ocho apellidos vascos'. "Esa película la vimos en el cine, en Sevilla, y yo me tronchaba con el personaje que interpretaba Karra Elejalde (Koldo), por encima del de Dani Rovira (Rafa, el sevillano). A mi mujer la conocí durante los dos años que jugué en Sevilla, ella era la fisio del equipo. Y entre masaje y masaje llegó el amor, un amor que dura ya ocho años y una niña de cuatro".
"He pasado el encierro todo lo bien que se puede con una niña pequeña que te repite constantemente que se aburre y que quiere bajar al parque. Como todos, dejé de salir de golpe, ya no tenía que llevarla al cole, no tenía que ir al gimnasio, no podía tomar un café. Poco a poco va pasando", detalla.
"No tengo nada pensado para la próxima temporada, todo es incertidumbre. Esto va a hacer mucho daño, me temo que muchos clubes LEB van a desaparecer", acaba.
