Un total de 21 niños de entre 5 y 13 años, casi el doble de la edición anterior, completaron entre lunes y viernes la tercera entrega del campus de fútbol de Loñoá, organizado por Ociosaugal.

Lunes y martes fue el turno del método Coerver, quedando para el miércoles una sesión destinada a los porteros, para el jueves una visita a las piscinas de Monterrei y para el viernes un All Star y la finalización del campus.

"El balance no puede ser si no muy positivo, hemos doblado el número de niños en unas fechas que no son nada fáciles. Hemos conseguido un campus muy dinámico, en el que al fútbol hemos añadido actividades como la visita a la piscina, y allí, entre olas, los chicos se lo han pasado muy bien", resume Quique Álvarez, el director de la empresa organizadora.

Ociosaugal ya piensa en el año 2020 una vez completados los campus de la UD Ourense, de Carmelitas y de Loñoá.