Demasiadas incógnitas se abren en la Primera Nacional menos gallega de los últimos años debido a la incorporación de tres equipos canarios. La renuncia del Camariñas, los problemas económicos del Lavadores y los movimientos en escuadras como el Xiria hacen complicado realizar algún tipo de vaticinio.

"El Lalín es uno de los claros favoritos a estar arriba, y luego hay un puñado de equipos para poder pelear. Nosotros tenemos el hándicap de la irregularidad, como cualquier filial, pero esperamos que no se note", apunta Miguel Santorio. Para Moncho, "hay mucha incertidumbre, porque no se sabe qué pasará con el Lavadores. Pero también está el OAR, que de momento no es el equipo del año pasado, pero luego siempre hace fichajes". La ventaja para los que peleen por evitar el descenso radicará en que solo habrá una plaza para bajar.

Con el Lavadores en situación complicada por la marcha de su patrocinador y el Xiria en reconstrucción tras las salidas de Amarelle, Pablo Iglesias y Vilanova, el Lanzarote podría ser otro de los aspirantes, tras fichajes de relumbrón con vitola de Asobal como los excangueses Santana y Espino o Ander Iriarte, además de varios extranjeros.

La presencia de los equipos canarios también es otra cuestión que genera dudas. "Es un tema complejo, ver en qué condiciones podemos viajar para competir y tampoco conocemos el nivel que pueden tener ellos", afirma Santorio, que ejemplifica con el Tenerife, "que era un equipo diferente en casa al de fuera". Las referencias serán mínimas, pues.