El entrenador del Balonmán Cangas Frigoríficos del Morrazo, Nacho Moyano, salió contrariado del choque de ayer en Guadalajara. Más allá del comienzo muy fuerte de los locales, el míster entiende que "no jugamos bien. No hemos estado a la altura de lo que exigía el partido ni a nivel de juego ni de intensidad". Reconoce que en algunos tramos sí que dieron la sensación de poder meterse en el encuentro y tratar de remontar, "pero no fuimos un equipo sólido. Jugamos a arreones", añade.
Nacho Moyano pone en valor también el enorme partido realizado por el portero local, el iraní Saeid Barkhordari. "No había hecho una gran pretemporada, pero en la primera jornada en La Rioja fue el que mantuvo al Guadalajara dentro del duelo en la segunda parte. Ayer se juntó todo, por un lado que nosotros no jugamos bien y por otro el partidazo de su portero". Y es que por momentos parecía que Saeid desesperaba a los atacantes del Cangas.
Al histórico meta José Javier Hombrados solo le quedó la opción de salir a tratar de detener, sin éxito, un lanzamiento desde siete metros. Por los visitantes, el meta suplente Gerard Forns también tuvo su oportunidad en un penalti en el tramo final. En su caso sí que consiguió detener el lanzamiento.
El aspecto positivo que deja para el Balonmán Cangas el duelo de ayer es que a priori no finaliza tocado ningún jugador. El técnico asegura que el dolor en un pie que obligó a retirarse a Dani Cerqueira en el ecuador de la primera mitad "no fue nada grave. Simplemente un golpe", de ahí que pudiese regresar al juego después sin mayores problemas.
En estos momentos el Frigo solo tendría en la enfermería a Carlos Vilanova, que en el entrenamiento del viernes, antes de partir a Guadalajara, causó baja por un virus.
