El portero Ayoub Atib, los centrales Arnosi y Javi y el mediapunta Richi se enfundaron ayer la elástica rojiblanca en su presentación como nuevos futbolistas del Alondras, en lo que supone una clara apuesta del club cangués por la juventud y por futbolistas de proyección de futuro. Y es que salvo Javi, que regresa a la entidad tras su paso por Compostela, Coruxo y Choco, y tras un año en Estados Unidos, los otros tres llegan desde la Preferente Autonómica.

Ayoub, de 20 años, lo hace desde la Sarriana tras haber militado en las categorías inferiores del Celta, con ilusión por "dar un salto importante, que me permitirá dar lo máximo e intentar subir de nuevo de categoría. Ese es mi objetivo", afirma el futbolista, que asegura que el hecho de que el Alondras disputase dos fases de ascenso de forma consecutiva lo empujó a aceptar su oferta. "Me gustó el proyecto del club, la mentalidad y el trato. Estoy deseando empezar", subraya. Avalado por unos notables informes, el meta marroquí pugnará por la titularidad con el canterano Martín.

Arnosi, por su parte, procede del Atios, equipo en el que disputó la recta final de Liga tras haber acabado la temporada en el Val Miñor de División de Honor Juvenil. "Noté el salto a Preferente, no tanto por el ritmo sino por la competitividad de la gente. Te enfrentas a jugadores de 33-34 años pero que luchan como si fuesen jóvenes", afirma. A sus 19 años de edad también asegura que los dos playoff de ascenso del Alondras en los últimos años han sido el principal atractivo para iniciar la aventura canguesa. "Es un muy buen equipo para dar el salto. Han apostado por mí, así que me toca pelear el puesto y ayudar en todo lo posible", afirma.

El futbolista vigués tiene la ventaja de su polivalencia, ya que puede actuar tanto en la posición de central como de mediocentro. "En mis primeros dos años de juveniles en el Areosa jugué de mediocentro y este último lo hice de central y fue el mejor año. La verdad es que me da igual, estoy cómodo en las dos posiciones", resume.

El fichaje de Richi supone el retorno de un futbolista formado en la cantera rojiblanca y que en su etapa sénior pasó por San Adrián, Bertamiráns, Moaña y Beluso. "No lo dudé. Después de ocho años y de haber hecho buenas temporadas en Beluso... van pasando los años y no llegas, así que siempre se agradece", afirma. Coincidirá con Pereira, a quien ya tuvo en el banquillo del Moaña y con el que logró el ascenso a Preferente. Ahora, en Tercera División, asume un nuevo reto. "Tengo muchas ganas e ilusión, y jugar en casa, en el Alondras, es un plus", afirma. A lo largo de este tiempo asegura haber cambiado mucho, "imagínate si ya lo hacemos de año en año, qué pasará con ocho años. Ahora tengo más experiencia y compromiso, es algo que se coge con la edad".

Javi, por su parte, regresa a un Alondras al que dio el salto desde los juveniles del Areosa de la mano de Curiel. Ya pudo haber llegado el año pasado, pero entonces "me surgió una oportunidad muy buena de estudiar en Estados Unidos y no pude decir que no". En ese sentido, asume que "tenía una cuenta pendiente. Fue bastante fácil. Algún equipo se puso en contacto conmigo, pero cuando me dijo el Alondras de venir no me lo pensé porque aquí pasé dos años muy buenos".

Sobre el hecho de llegar a un equipo en plena reconstrucción tras haber sufrido bajas importantes, Javi no le concede excesiva importancia. "Los equipos de mitad de la tabla hacia arriba en Tercera son muy parejos y hay mucha competencia", dice. Y añade que "la clave es hacer un buen grupo, una piña, y mejorar todos juntos".