Martín Riobó está viviendo un sueño por el que suspiraba desde hace tiempo: competir en el mundial de trial. El año pasado, el joven piloto de Aldán ya pudo disputar alguna de sus citas para probarse, pero en este 2018 ya compite de pleno derecho y con posibilidades reales de alcanzar el título. Este fin de semana ha competido en uno de los templos del mundo del motor: la localidad japonesa de Motegi y el sábado llegó a colocarse como líder provisional del mundial. Ahora vuelve a ser segundo, a solo cuatro puntos del líder, el británico Billy Green.

- ¿Cómo han sido sus sensaciones en un lugar tan especial como Motegi y Japón?

- Muy buenas. El sábado no me esperaba el triunfo en la primera jornada del gran premio, fue una sorpresa para mí. El sueño que tengo de algún día llegar a ser campeón del mundo se va cumpliendo, parece que está más cerca. La experiencia de estar en Japón ha sido increíble: la organización, la gente, la cultura... Es un lugar totalmente diferente.

- Por decirlo de alguna manera, el sábado la moneda cayó de cara e incluso se colocó como líder provisional del mundial. El domingo le salió la cruz. ¿Cómo lo vivió?

- Lo que ocurrió el domingo fue debido a un problema con la moto. Fue una pena porque significó pasar de ser primero el sábado a ser sexto el segundo día. Cuando empezó a fallar la moto y me penalizaron también bajó un poco la motivación.

- ¿Ya lo ha superado?

- Sí. Lo que pasó el domingo va a ser una motivación extra para seguir peleando por el mundial, ahora voy a ir con más ganas. La verdad es que nunca pensé que este año podía estar peleando por un triunfo o por el podio. Ahora veo que sí puede ser.

- Usted es uno de los pilotos más jóvenes, con solo 16 años y en una categoría en la que hay rivales de hasta 21 años. ¿Cómo ve el nivel de este Trial 125? ¿Ha causado ya cierta impresión?

- La verdad es que hay pilotos muy buenos, con mucho nivel. Billy Green, que ahora es el líder del mundial, el año pasado ya fue subcampeón del mundo. Yo el año pasado solo participé en algún gran premio para probar, pero parece que están un poco impresionados conmigo. Ahora ya conocen Cangas y Aldán y hay quien quiere venir a entrenar aquí.

- A la vista de la clasificación y de como se han desarrollado estas primeras pruebas del mundial parece que el título va a ser un duelo entre usted y Billy Green.

- No lo creo. Insisto: hay mucho nivel, con igualdad entre los pilotos. Si alguien comete un fallo o tiene un problema en los grandes premios enseguida puede destacar otro. Quedan tres pruebas para que acabe el campeonato y no creo que esto vaya a ser cosa de dos

- El calendario se comprime en junio. Este fin de semana ha estado en Japón y antes de acabar el mes habrá nuevas pruebas en Portugal y Andorra. Y para acabar Italia en septiembre. ¿Ya conoce el terreno en el que le tocará competir?

- La gran incógnita va a ser Italia. De Portugal, debido a la cercanía con Galicia, sí que tengo referencias. Andorra es un lugar que me gusta porque hace años que voy a entrenar y a competir allí. Voy a intentar hacerlo lo mejor posible, aunque la incógnita será Italia.

- ¿Cómo es la vida de Martín Riobó? Supongo que tendrá que compaginar el deporte con los estudios.

- Sí. Tengo la suerte de que desde el instituto me ayudan mucho porque me envían trabajos y temarios para seguir al día. En lo que respecta al trial entreno todos los días. Hay que hacer trabajo encima de la moto, pero también físico.